Por Juan Manuel Jiménez García.
Miguel Tronco, fortalecido después de las elecciones.
Con la entrega de constancias de mayoría a los regidores que salieron electos el pasado 4 de junio, se cierra el proceso electoral de este año 2107, y como dijera Gloria Trevi es hora de hacer un recuento de los éxitos y fracasos.
Desde luego que el ganador absoluto fue Miguel Ángel Tronco Gómez, y no lo digo por la cantidad de votos de diferencia que sacó de su más cercano perseguidor, esa es otra historia, sino por los mensajes que tiene su triunfo, el más claro es sobre que el Tronquismo está de regreso, y que echa por la borda aquellos comentarios mal intencionados que decían que Miguel no era Renato.
Para poner en contexto esto que estoy comentando, quiero irme unos meses antes de las elecciones del 4 de junio, en aquella ocasión cuando Miguel dio a conocer que participaría como candidato a la presidencia municipal, muchos ciudadanos pensaron que el tronquismo estaba muerto y el hermano de Renato no tenía la más mínima posibilidad de ganar.
Inclusive este sentir lo tenían gente cercana a los Tronco que a falta de fe, decidieron buscar otras opciones con otros partidos y otros candidatos, gente beneficiada con el tronquismo, literalmente le dio la espalda a las aspiraciones de Miguel, pensando erróneamente que este movimiento estaba sepultado.
Todavía, a unos cuantos días de que iniciaran las campañas, los malos augurios sobre el oriundo de Río Playas no eran buenos, en los pasillos políticos se escuchaba decir que a Miguel no le permitirían llegar por el asunto de su hermano, que tenía que negociar con el gobernador en turno para que lo dejara participar pero que esto no se daría por cuestiones de políticas.
Para esto Miguel Tronco seguía escuchando el sentir de la población, ya que en muchas ocasiones había declarado que sería alcalde de Las Choapas por voluntad de Dios y los ciudadanos.
Empiezan las campañas, y con estas, una serie de ataques en contra del candidato del Partido del Trabajo en las redes sociales, pero sus enemigos no se imaginaron que estos mensajes difundidos a través de whatsapps y Facebook tendrían un efecto contrario a lo esperado.
Miguel Ángel Tronco Gómez se convirtió en el aspirante a la presidencia municipal con más seguidores en sus mítines, en pocos días de campaña, pasó a ser el candidato favorito para miles de Choapenses, y conforme se acercaba la fecha de las votaciones, sus momios subían como la espuma.
En la parte final de la campaña, se dejó sentir el odio enfermizo de los detractores del tronquismo y ya desesperados arremetieron de nueva cuenta en contra de Miguel Tronco para influir en los votantes, pero a esas alturas estaba todo definido, inclusive para el gobernador del estado, que en sus encuestas marcaban que el candidato del Partido del Trabajo iba arriba por tres puntos.
Para el 4 de junio, ese domingo solo fue de trámite, y no fue necesario esperar hasta las 10 de la noche para saber las encuestas del PREP, que Miguel Tronco era el vencedor de las elecciones, al mediodía era un secreto a voces y en muchas colonias la diferencia fue abismal por no decir que fue una mega madriza.
Por todas estas circunstancias Miguel sale fortalecido, y el tronquismo da una bofetada con guante blanco para aquellos que decían que las gestiones de este movimiento habían sido las más desastrosas administraciones del municipio.
Miguel da el mensaje que el tronquismo está más vivo que nunca, y le duela a quien le duela, se sabe que este proyecto es a largo plazo y no solo de 4 años, Miguel deja en claro que el tronquismo no es solo un hombre o figura, sino un grupo de voluntades por un bien en común de Las Choapas.
La contundencia del gane del candidato del Partido de Trabajo deja en claro el hartazgo social que se vive en el municipio, deja en claro que los partidos políticos al menos en el municipio, atraviesan por una grave crisis, que los proyectos políticos y sociales como el tronquismo siguen vigentes.
SE LE VIENE LA NOCHE A CARLOS JIMÉNEZ, LÍDER DE LA SECCIÓN 26.
Con el dictamen de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, queda en claro que el líder “inmoral” de los trabajadores petroleros de la Sección 26, se encuentra solo, políticamente hablando, ya que como se pensaba de manera equivocada no cuenta con el apoyo del secretario nacional, Carlos Romero Deschamps.
Y no es para menos, ya que Deschamps está más preocupado en salvar su pellejo por las múltiples denuncias por desvió de recursos en el sindicato petrolero, en desmentir los excesos que se da su hijo en Europa, presumiendo un auto de millones de pesos, que en pensar en todos los atropellos de su pupilo en la sección 26.
Carlos Jiménez tienen que acatar el fallo de la Suprema Corte de Justicia, de lo contario corre el riesgo que se le finquen acciones penales, y si piensa que el poder del sindicalismo petrolero lo hace intocable, solo tiene que recordar casos de personajes con mayor poder y presencia que él, como es el caso de Onésimo Escobar Gómez y Barragán Camacho.
La orden es clara y precisa, la sección 26 tiene la orden de realizar nuevas elecciones para elegir al secretario general con el nuevo mandamiento constitucional; VOTO SECRETO, pero además tienen el mandato las planillas participantes de no obligar a sus simpatizantes realizar ningún tipo de proselitismo a favor de los candidatos.
La noche se le viene a Carlos Jiménez pero en esta ocasión sin el cobijo de su maestro y el repudio de los agremiados y sino al tiempo.
