Policías federales que llegaron al Congreso local luego de que integrantes de la Asamblea Nacional Popular (ANP) quemaran seis unidades repartidoras de productos chatarra, persiguieron por la Autopista del Sol a normalistas que corrieron tras los hechos con dirección al sur de la ciudad.
El operativo fue coordinado por el comandante José Luis Solís “Espartaco”, quien junto a unos 100 policías federales corrieron portando equipo antimotín, a unos metros del Congreso, por donde corrieron normalistas de Ayotzinapa.
La persecución ocurrió sobre la circunvalación de la avenida Trébol adyacente al recinto legislativo, hasta llegar al bulevar Vicente Guerrero, que cruza en Chilpancingo, a la Autopista del Sol.
Duró aproximadamente 10 minutos la persecución, pero finalmente no hubo detenidos. Los policías pasaban entre los carros para detener a los normalistas, varios de ellos cubiertos del rostro. No hubo detenidos.
El contingente de organizaciones, entre ellos los padres de familia de los 43 normalistas de Ayotzinapa, se retiraron al zócalo de Chilpancingo.
Policías federales colocaron seis de sus autobuses en la entrada principal del Congreso del estado. Unos 100 policías federales resguardan el acceso principal del estacionamiento.
Además, peritos de la Fiscalía General del Estado (FGE) llegaron al recinto a tomar nota de los daños realizados por las organizaciones a siete meses de que ocurrió la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa.
