¿Tu hijo debería tener celular?

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Se ha vuelto una herramienta necesaria; si decides dárselo, expertos recomiendan que lo hagas a partir de los 14 años.

2016-02-06

Redacción

Centro, Tabasco; Actualmente, los Smartphone son el regalo estrella para los niños, todos quieren uno y todos los padres se plantean si deben comprárselo a sus hijos. Por un lado, pueden ser una herramienta para el ocio y el aprendizaje, sin embargo, también implican una serie de peligros. Por eso, es necesario conocer cuál edad es la adecuada para que los niños tengan su primer celular.

De acuerdo a los especialistas, la edad adecuada es entre los 13 y 14 años; aseguran que, a partir de esta edad, los niños ya son capaces de utilizarlo de forma más sensata y con mayor madurez, además es la edad en que empiezan a independizarse.

Por lo general: se han adaptado a la escuela, tienen un grupo de amigos más definido y un entorno establecido.

Sin embargo, es importante establecer una serie de reglas para el uso de dispositivos celulares.

Reglas de oro:

1 Apagarlo por la noche:
Es necesario que aprendan que cuando llega el momento de irse a la cama el móvil debe quedar apagado. Por la noche, es importante que los niños descansen y dejen los pendientes.

2 Enseñar con el ejemplo:
Igualmente, cuando los padres llegan a casa deben dejar en un segundo plano el teléfono. Ya no están en el trabajo, ahora es un momento para compartir en familia. Dar un buen ejemplo será determinante para que los hijos aprendan cuándo y cómo deben utilizar el móvil.

3 Cuidar la privacidad:
Es importante que, una vez que los niños tengan móvil, conozcan las maneras más adecuadas para proteger su privacidad. Compartir fotos, contactos o ubicaciones los va a poner en riesgo, por eso es importante que aprendan a usar el celular de manera responsable.

4 Limitarse al fin de semana:
El mejor momento para que, al menos al principio, los niños utilicen el Smartphone es los fines de semana. Así, no será un elemento de distracción a la hora de estudiar, ni a la hora de dormir e, igualmente, no será un impedimento para la comunicación padre-hijo.

No debe tenerlo si…

• No descansan. Algunos niños no saben ponerse límites y algunos lo usan incluso por la noche, quitándose horas de descanso.

• Incumplen obligaciones. Estar haciendo los deberes con el dispositivo al lado se suele traducir en un descuido del estudio y de cualquier otra actividad diaria.

• Descuidan su intimidad. Un uso irresponsable del teléfono: colgar imágenes comprometidas en redes sociales o contactar con desconocidos, son problemas serios.

• Hay comunicación deficiente en la familia. Aquellos niños que utilizan el Smartphone continuamente, sin restricciones durante las comidas o el tiempo en familia, contribuirán a un alejamiento.

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