Moloacán, Ver.
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Debido a que la sección 16 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), el cual tras bambalinas aún lidera Omar Ricárdez Chong, no consiguió adjudicarse el contrato con la compañía Lifting de México, con el que conservaría poder por al menos 30 años, ahora mediante un proceso legal inverosímil, está tratando que el campo Cuichapa-Poniente regrese nuevamente a manos de Pemex.
Mientras se espera el resultado de la demanda que inició, está utilizando a algunos líderes sindicales para impedir los trabajos de las compañías subcontratadas, por lo que Lifting únicamente está operando en instalaciones como la Estación Compresoras, la Planta de Inyección de Agua Congénita y Batería 2.
Para más de uno queda más que claro que la acción tomada por el alcalde y líder petrolero de Moloacán es una forma de tomar venganza por no haber logrado su objetivo, ya que surge el cuestionamiento del porque no hizo nada desde tiempo atrás para que el campo no pasara a manos de la iniciativa privada.
Debido al proceder de Ricárdez Chong, quien ha manifestado estar preocupado por el bienestar de las familias del municipio; está ocasionando que los problemas para las familias de escasos recursos se hagan mayores, ya que siguen sin obtener empleo, al impedir que las compañías realicen sus labores y con esto contraten personal.
Para desgracia del aún alcalde las sorpresas no terminan, ya que la Coalición de Sindicatos Mártires de Chicago está a pocos días de que los tribunales le asignen el contrato, lo cual hará más grande la molestia que se conjuntará con la derrota de su esposa en la pasada contienda electoral.
Mientras tanto la clase trabajadora espera que en poco tiempo los problemas legales terminen, ya que la situación laboral ha sido crítica.
