Chanchal Lahiri, mejor conocido como el mago Mandrake, intentó imitar el acto del famoso ilusionista Harry Houdini pero todo terminó en una tragedia.
Mandrake quería sobrevivir a la hazaña de sumergirse encadenado en el agua, liberarse y salir nadando del río.
Fue el pasado domingo cuando el mago se ató de manos y pies con cadenas, cuerdas y candados y fue sumergido de cabeza en el río, frente a la mirada de sus espectadores y familiares pero su cuerpo no apareció hasta ayer lunes.
Según el medio Press Trust of India, pasaron al rededor de 10 minutos y Lahiri no salía la superficie; las personas presentes comenzaron a entrar en pánico.
“Si soy capaz de hacerlo es magia. Si no puedo abrirlo es una tragedia”, dijo antes de comenzar su acto de escapismo.