‘No estoy de acuerdo, yo creo que el PAN puede ganar solo, yo creo que el PRD tiene un gran desprestigio’, afirmó.
“No estoy de acuerdo, yo creo que el PAN puede ganar solo, yo creo que el PRD tiene un gran desprestigio”, afirmó.
“El PAN puede ganar solo y no se trata de ganar a cualquier costa, se trata de defender un programa político, se trata de defender ciertos valores, ciertas libertades que el Partido Acción Nacional siempre lo ha defendido y hemos ganado solos también”.
Entrevistado luego de participar en el modelo de Naciones Unidas en el ITAM, reiteró que el PAN tiene buenas personas y candidatos y que debería buscar ganar como siempre lo ha hecho.
Respecto al planteamiento de Ricardo Anaya, dirigente del PAN, sobre que se debe buscar alianzas en entidades federativas donde no ha habido alternancia, Cordero consideró que era un argumento respetable.
Durante su participación ante jóvenes universitarios, Cordero defendió las políticas impulsadas en el Gobierno de Felipe Calderón, en el que se desempeñó como Secretario de Hacienda y de Desarrollo Social.
Destacó que Calderón terminó su mandato con una popularidad de 64 por ciento, el doble de la que tiene Enrique Peña Nieto actualmente, y afirmó que en ese sexenio se modificó la Constitución como nunca antes, 37 veces, lo que demostró que era un Gobierno capaz de hacer política.
“Pareciera que el Presidente Calderón terminó en el mayor de los descréditos: absolutamente nada más falso”, subrayó.
Cordero presumió que Felipe Calderón regresó a vivir a la misma casa, que puede acudir a cualquier plaza pública y recibir el saludo de la gente.
Asimismo, aseguró que la práctica de los moches en la Cámara de Diputados se acentuó en este Gobierno, pues cambió la forma de elaborar el Presupuesto de Egresos de la Federación.
En tanto, Alejandro Poiré, que fuera Secretario de Gobernación durante el sexenio de Calderón, aseguró que el financiamiento de la política en México tiene una serie de restricciones diseñadas para proteger a los partidos y que el resultado es la generación de un mercado negro extraordinario.
“Hoy hay elecciones en México que están bañadas de dinero, pero lo que es peor es que ese dinero sea malo per se”, afirmó el actual decano de la Escuela de Gobierno y Transformación Pública del Tecnológico de Monterrey.
“Es que como los topes de gastos de campaña son chiquitos, como está absolutamente prohibido gastar en radio y televisión, como hay un gran financiamiento público, como se puede recibir muy poco dinero de donativos privados, entonces por supuesto que ese mercado de influencia política existe, pero todo está en el mercado negro”.
Agregó que, ante los fuertes incentivos a la corrupción, generados por la competencia política democrática, en ese sentido hay una reforma pendiente.
Ernesto Cordero y Alejandro Poiré participaron en una mesa sobre el Gabinete de Felipe Calderón.