Beatriz Gutiérrez Müller, esposa del expresidente Andrés Manuel López Obrador, ha comenzado formalmente el proceso para obtener la nacionalidad española.
Según el medio español ABC, el trámite lleva a cabo bajo el amparo de la Ley de Memoria Democrática. El mismo se encuentra vigente desde octubre de 2022.
Explicaron que la exprimera dama había estado en las oficinas consulares españolas en Ciudad de México. En un principio se pensó que podría solicitar un visado de estudiante.
Derecho por descendencia
Gutiérrez Müller tiene derecho a la nacionalidad por ser nieta de catalanes por parte materna y de castellanos por la paterna.
Por causas históricas, la ley contempla este tipo de casos como parte de su esfuerzo por reconocer a descendientes de exiliados y migrantes.
Aunque México y España no tienen tratado de doble nacionalidad, la legislación mexicana permite conservar su ciudadanía original.
Perfil académico y político
Ella nació en enero de 1969 en la Ciudad de México. En la parte académica, es doctora en Teoría Literaria por la UAM y licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Iberoamericana de Puebla.
Su carrera académica ha estado marcada por la escritura, la investigación y la docencia.
Como primera dama, mantuvo una posición activa en asuntos culturales y de memoria histórica.
Ella fue una de las impulsoras en el 2019, de una carta enviada a la Corona española solicitando una disculpa pública por los crímenes cometidos durante la Conquista de México.
Un gesto que marcó relaciones
“Comenzó como un acto de voluntad personal contra las indicaciones y marcos legales del Reino de Castilla y la conquista se realizó bajo innumerables crímenes y atropellos”, señalaba la carta enviada por el Gobierno mexicano a España. Y agregaba: “Con este propósito, el Gobierno de México propone a Su Majestad que se trabaje a la brevedad, y en forma bilateral, en una hoja de ruta para lograr el objetivo de realizar en 2021 una ceremonia conjunta al más alto nivel”.
Ante la falta de respuesta oficial, López Obrador profundizó el conflicto diplomático, utilizando sus conferencias matutinas para criticar públicamente a la monarquía española. La tensión culminó en 2022 con una “pausa” simbólica en la relación bilateral, aunque las inversiones y colaboraciones no se detuvieron.
Fuente: Reforma