Juan Manuel Jiménez García.
Las Choapas, Ver.
Un grupo de personas cumplieron el deseo del niño Alisandro, mejor conocido como el niño de las vías, en un video que se dio a conocer a través de las redes sociales, el infante externaba su deseo de celebrar sus 15 años, ya que nunca ha tenido una fiesta de cumpleaños.
Este 31 de diciembre, Alisandro cumplió 15 años, y como todos los años pensó que serían como las otras ocasiones, un poco desanimado desayuno un poco de café con pan, después de esto, salió como lo hace todos los días hacia la calle Tancochapa, en ese lugar suele realizar mandados a los vecinos o solo espera que los conductores que pasan por esta vía le regalen unas monedas.
Eran alrededor de las 13:00 horas, un poco desanimado, decidió regresar a casa, pensó que era mejor ver un poco de televisión con el vecino y de ahí irse a dormir, total no iba a suceder lo que siempre ha anhelado: UNA FIESTA DE CUMPLEAÑOS.
Ayudado por sus manos, recorrió el trayecto rumbo a su domicilio, paso entre las vías, esas vías que le traían malos recuerdos, y a pesar que todas las noches pedía al ser supremo irse a otro lugar, se resignaba a soportar esa vivencia que lo dejo marcado para siempre.
Unos metros antes de llegar a su humilde casa, construida con láminas de zinc oxidadas, fue llamado por un vecino, que le comentó que unas personas lo habían venido a visitar, Alisandro volvió a dudar de su sueño, y pensó que estas personas eran las mismas que siempre vienen por curiosidad o a dejar alguna ayuda.
Cabizbajo siguió su camino, pero en cuanto se estaba acercando más a su domicilio escucho risas y voces de niños, eso lo alegró, porque siempre era bueno jugar con amigos de su edad, así que decidido a pasar un rato agradable apresuro su andar para llegar cuanto antes a vivienda.
Alisandro quedó congelado con la imagen que vio, en un costado de su casa, estaba una mesa con un mantel blanco, encima se encontraba un pastel, rodeando este pastel se encontraban varios niños que sujetaban una piñata.
Alisandro se rascó los ojos pensando que se trataba de un sueño, los cerró y los volvió a abrir, pero la imagen continuaba ahí, un poco más calmado se dio cuenta que todo era real, que por fin tendría su fiesta de cumpleaños.
Con lágrimas que resbalaban por sus mejillas, agradeció a todas las personas que hicieron posible esta experiencia.
Este joven ya, porque este día 31 de diciembre llegó a la edad de 15 años, compartió este momento con los presentes que, aparte del pastel, le llevaron bocadillos y regalos, pero sobre todo le compartieron un poco de bondad y cariño.
Alisandro es un joven que no cuenta con sus extremidades inferiores, esto debido a un accidente en el año de 2007, cuando se encontraba jugando en las vías del tren y por un descuido del maquinista y de su propia madre perdió ambas piernas y dedos de su mano.
