Un nuevo estudio halló que tomar té caliente con frecuencia favorece el cáncer de esófago, no obstante, llama a hacer más investigaciones
Basándose en estudios que relacionan el té caliente con el cáncer de esófago, un grupo de 21 científicos analizó los efectos de la bebida dependiendo su grado de temperatura, a fin de evaluar el grado de peligro para desarrollar el carcinoma.
Los expertos desarrollaron su investigación de 2004 a 2017, dando seguimiento al consumo de té caliente de 50 mil 027 habitantes de Golestán, Irán. En tal lapso identificaron 317 casos de cáncer de esófago.
El motivo para tomar como muestra a la población de Golestan fue que allí, el té y el agua son las bebidas que más se consumen, en tanto que específicamente el té se toma a altas temperaturas.
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer considera que “beber bebidas muy calientes a más de 65 grados C” es “probablemente carcinogénico”.
No obstante, los efectos combinados de temperatura y cantidad de bebida del nuevo estudio señalan que el tomar alrededor o más de 700 mililitros de té a más de 60 grados Centígrados al día, eleva 90 por ciento el riesgo de desarrollar cáncer.
“Sin embargo, no encontramos una interacción estadísticamente significativa entre la temperatura del té y la cantidad de riesgo de desarrollar el carcinoma”, señalaron los científicos.
El estudio publicado en la International Journal of Cancer señala que los té negro y verde, consumidos por los habitantes de Golestan, tienen antioxidantes que pueden reducir el riesgo de cáncer, pero también ‘compuestos potencialmente cancerígenos’ cuando se procesa, por lo que hay que medir su consumo.
Los científicos concluyen el informe indicando que se necesitan más investigaciones sobre la asociación del té caliente con el cáncer de esófago.
“Como no se conoce ningún beneficio para la salud el consumo de bebidas muy calientes, será razonable recomendar a las personas en Golestan y en otros lugares que esperen a que sus bebidas se enfríen antes de tomarlas.”