El viejo se niega a morir

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Martín Cruz Alegría

Nanchital, Ver.-

Procedentes del municipio de Orizaba, arribaron a esta ciudad vendedores del tradicional viejo hecho a base de tela y papel periódico, para que sean rellenados de cohetes por la ciudadanía y quemados a manera de despedir tradicionalmente el año viejo; sin embargo, estos comerciantes hasta el momento no han visto interés de los habitantes por adquirirlos.

Los comerciantes opinaron que posiblemente la tradición del viejo ya se ha ido perdiendo, pues cada año es menor el interés que despierta entre los habitantes la quema de este muñeco tradicional que elaboran artesanos de Orizaba cuya pieza tiene un valor de 150 pesos.

Confían que este 30 y 31 de diciembre, inicie la euforia por la compra de los viejos, aunque es casi un hecho que algunos compradores pedirán rebaja, por lo que los vendedores están dispuestos a rematarlos hasta en 120 pesos con tal de que no se rezague la mercancía.

Comentaron que en otros años, desde su llegada a Nanchital, la gente se acercaba a preguntar costos y si estaba al alcance de sus bolsillos lo compraban, pero ahora son muy pocas las personas que se acercan a preguntar, por lo que con esto se comprueba que ya la tradición del viejo se ha ido perdiendo aunado a la apretada situación económica por la que atraviesan las familias.

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