Ahora en el fraccionamiento Guadalupe Tepeyac
Martín Cruz
Nanchital, Ver.-
Al menos diez familias, se encuentran invadiendo las áreas verdes ubicadas frente al hospital general de Petróleos Mexicanos (Pemex) en el fraccionamiento Guadalupe Tepeyac, cuyo propietario es la Sección 11 del STPRM, terreno considerado de alto riesgo por donde atraviesan ductos de la paraestatal y que colinda con la reserva ecológica El Nanche.
En busca de obtener un nuevo patrimonio, familias de Nanchital, comenzaron a lotificar y talar árboles, una vez más en terrenos de la sección petrolera, una área aproximada de tres a cinco hectáreas localizada frente al hospital de Pemex en dicho fraccionamiento y por donde atraviesan ductos que la convierten en una zona de peligro.
Los invasores comenzaron a llegar a partir de este sábado, con maderas, machetes y palas, para talar y lotificar el terreno que por años ha sido considerado como una reserva ecológica de la Sección XI quien hace algunos años donara un espacio de ésta para la construcción del Centro de Desarrollo Comunitario.
En este sentido, el síndico único Eusebio Ruiz Ruiz, mencionó que el Ayuntamiento no está facultado para actuar, debido a que se trata de un terreno particular cuyo dueño es la Sección 11, organización sindical que se encargará de proceder legalmente en contra de los paracaidistas, mientras que el gobierno municipal, sólo se ha limitado a tomar nota de los hechos.
Recalcó, que desde el sábado, comenzó a registrarse movimiento de personas que de manera inesperada comenzaron a introducirse en los terrenos que se ubican frente al hospital de Pemex y que colindan con la reserva ecológica El Nanche.
“El Ayuntamiento se ha dado a la tarea de mantener protegidas las áreas verdes que corresponden al municipio; sin embargo, no puede proceder contra los paracaidistas, pues los terrenos tienen dueño” Apuntó.
Los invasores –dijo, no sólo están poniendo en riesgo a la población al asentarse en zonas por donde corren ductos activos de la paraestatal, sino que están atentando gravemente contra la flora y fauna silvestre, ya que el derribo de árboles que efectuaron en este este terreno, se suma a la tala inmoderada de los más de 5 mil árboles frutales y maderables que efectuaron invasores en el predio El Rodeo, cuyo propietario es también el sindicato petrolero.