Por El Bicho Politicón
Hace un año, muchos se quitaron el miedo y salieron masivamente a votar contra el cacicazgo del líder petrolero de la sección 16, quien había postulado a su esposa para sucederlo en el trono, perdón, en el poder y pensaba que sus tracalerías tendrían una tapadera de su tamaño.
Hacía las 6 de la tarde cerraron los centros de votación, los resultados de las 24 casillas empezaron a fluir hacia las 7 de la tarde-noche, en Villa Cuichapa la ventaja era para “Mamá Tere”, por muy poco margen, pero ventaja al fin… tres reses en barbacoa estaban a la espera para el festejo, camionetas cargadas con ‘alegres’ priistas llegaban al auditorio petrolero…
Se les veía nerviosos, las cuentas no cuadraban, la cabecera municipal era un hervidero de morenistas, uno a uno los paquetes iban llegando al cuartel general del OPLE, la suma de los votos avanzaba lentamente ya que virtualmente era imposible pasar el filtro morenista… la furia era tal que todo lo que oliera a PRI podía ser la mecha que encendiera los ánimos.
Alrededor de las 11 de la noche los resultados daban una ventaja de 180 votos a la candidata de Morena… el júbilo en la cabecera municipal contrastaba con lo que acontecía en el auditorio Lázaro Cárdenas, caras largas, discusiones, acusaciones de traición.
En una elección ejemplar Morena obtuvo el triunfo, el pueblo festejaba con una Vicky Rasgado que supo cómo vencer a la mafia local… lo que siguió fue una larga espera de procesos judiciales que lo único que hacían era más vergonzosa la derrota…
Del festejo en el auditorio se supo que se salvaron las tres reses y solo repartieron unos fríos hot dogs… mientras tanto, faltan menos de 30 días para un festejo mayor.
Pues eso.
