En contraste con la primera información donde se indicó que se registró una explosión en el complejo petroquímico Cactus y, el desalojo de más de 2 mil trabajadores, a través de un comunicado, Pemex negó tales hechos.

La empresa petrolera informó que una interrupción del suministro de energía generó que la planta dejara de operar momentáneamente, por lo que tuvieron que poner en marcha los procedimientos de seguridad.

Como parte de los protocolos internos, Pemex señala que se realizaron “desfogues controlados de gas a la atmósfera”. De igual manera asegura que la maniobra no representó ningún riesgo para la población y, que no fue necesaria la evacuación del personal, además que no resultó nadie lesionado, ni daños en las instalaciones.

Sin embargo en un video grabado desde el lugar al momento del siniestro, se puede observar que las llamas no solamente surgen de las torres, sino también a ras de suelo.