Pese a robar la batería, descomponer el coche y pagar una multa de mil pesos el segundo comandante le exige dos mil pesos para entregar la unidad.
De no entregar el coche convocaran a una marcha y toma de palacio por tanto abuso policiaco.
Jairo Torres Luría
60minutos.digital
Moloacán.-
Juan Sánchez Santiago, vecino de Trancas Viejas localidad perteneciente a este municipio, ante este medio de comunicación dio a conocer que el pasado miércoles 24 del pasado mes de junio, fue detenido por elementos de la policía municipal bajo el mando del segundo comandante Bruno Iruviel Villegas Martínez, esto luego de que fuera reportado por la subagente municipal Minerva Duncan quien denuncio la presencia de un conductor quien estaba poniendo en riesgo la integridad física de la población tras conducir bajo los efectos del alcohol.
Explicó que la policía municipal acudió al llamado hecho por la subagente municipal, como si se tratara de un peligroso delincuente lo siguieron y sin tomar en cuenta que podían ocasionar un accidente le cerraron el paso con la patrulla. Posteriormente le pidieron que descendiera de la unidad señalándolo que estaba bajo los efectos del alcohol.
Al lugar acudieron familiares de Juan quienes se mostraron sorprendidos al ver que había sido esposado y que sería llevado a la comandancia municipal. Las llaves del vehículo Pointer de la marca Volkswagen color negro, con placas de circulación YHU-90-40 del estado; las tenía su menor hija, a quien el desadaptado segundo comandante Bruno Iruviel jaloneó para después arrebatárselas dejándole marcas en el antebrazo izquierdo, posteriormente se llevaron la unidad a la cabecera municipal, sin dar parte a las autoridades viales correspondientes.
El vehículo en manos del segundo comandante sufrió de algunos desperfectos al calentarse ya que el ventilador de enfriamiento entra de manera manual, quedándose a mitad del camino, por esto el uniformado Carlos Santos y Jesús Arredondo apoyaron al comandante para remolcar la unidad con apoyo de una patrulla.
El detenido al ser llevado a la cabecera municipal fue puesto tras las rejas, dijo que no fue certificado por un médico para corroborar si efectivamente se encontraba bajo los efectos del alcohol, al lugar también llegaron sus familiares entre ellos su madre quien fue atendida por el primer comandante José Carlos Martínez Torres, la señora le externó que los apoyará para poner en libertad nuevamente a su hijo, por esto le fue impuesta una multa de mil pesos sin que se le entregara un recibo oficial, con el argumento de que ya no entregan recibos.
Juan Sánchez, negó que al conducir el vehículo se encontrara bajo los efectos del alcohol, además de que no conducía a exceso de velocidad, lo que llamó la atención de sus vecinos y de la primera autoridad de la congregación fue el ruido que genera el escape que está dañado, además de explicar que se dirigía a casa de su mamá.
Tras el abuso policiaco tomaron la decisión de interponer una denuncia en la agencia del Ministerio Público Investigador de la ciudad de Nanchital, y es que dijo que tras revisar su coche notó que presenta problemas con la batería por lo que no descarta que se la pudieran haber cambiado, además el vehículo lleva ocho días en el estacionamiento del palacio municipal, lo cual dijo le ha ocasionado problemas sobre todo para poder trasladarse a su centro de trabajo.
Explicó que luego de cubrir el pago de la multa, Bruno Iruviel Villegas Martínez le hizo mención que para poder llevarse el carro tendría que pagar la cantidad de 2 mil pesos más, pero al no traerlos en el instante no se podría llevar el vehículo teniendo que dejarlo en garantía. Luego de algunos días el primer comandante José Carlos Martínez Torres le autorizó que se podía llevar la unidad, pero su subordinado Villegas Martínez se opuso mencionándole que no se lo podría llevar hasta que pagara lo que habían acordado.
La problemática se la expusieron a la síndica única Evelia Contreras Hernández, quien pese a tener a su cargo de la comisión de seguridad pública, simplemente dijo que no podía hacer nada y que fuera directamente con la policía municipal. El denunciante agregó que dejó un escrito en el cual exponía que acudiría en próximos días a cubrir el adeudo con los uniformados para poder llevarse su carro.
Terminó diciendo que la actitud de elementos como el segundo comandante es completamente reprobable, ya que por ser la autoridad se siente intocable y que pueda hacer lo que le plazca, por esto señaló que seguirá con su denuncia hasta que los uniformados y principalmente Villegas Martínez sea sancionado como debe de ser.
Los familiares dijeron que en caso de no llegar a ningún arreglo convocaran a una marcha y protesta por tantos abusos policiacos y tomaran el palacio municipal para que corran al segundo comandante por abusivo quien se siente protegido y aspira a ser el primer comandante.
