Elizabeth Aviña
Coatzacoalcos, Ver.
El Poder Judicial debería ser elegido por los ciudadanos y no puesto a modo por el Ejecutivo y Legislativo para evitar complicidades como el caso del ex fiscal Luis Ángel Bravo Contreras, expresó el presidente de la barra de abogados en Coatzacoalcos, Homero Gutiérrez Melchor.
Añadió que incluso ya existe una iniciativa popular que pide exista un organismo con autonomía que sea filtro para que los servidores públicos que tienen decisiones trascendentales, tanto en la vida política, económica y social de nuestro estado, superen un proceso de selección para ver si más allá de tener la preparación profesional, su condición intelectual le permite asumir esa responsabilidad.
“Con la dinámica del derecho, a estas alturas deberíamos tener la oportunidad de elegir a los tres representantes de los tres poderes, porque es muy fácil apreciarlo, mientras el ejecutivo propone al judicial, el legislativo lo aprueba o selecciona de la terna donde no hay mucho margen que escoger y regularmente quienes son elegidas últimamente no cumplen con el perfil mínimo”, declaró.
Ejemplificó que alguien que ocupe una magistratura en el poder judicial, debería tener una trayectoria limpia más allá de tener ligas o nexos con intereses de cualquier naturaleza política, económica o social.
“Sería necesario que el compromiso fuera con su propio ejercicio profesional, que fuera misionero de su profesión y sus decisiones fueran imparciales porque prácticamente el ungido está en deuda con ambos poderes y eso no permite llevar a feliz puerto las decisiones trascendentales”, sostuvo.
Gutiérrez Melchor reiteró que Bravo Contreras se supone era abogado del Estado, no del Gobierno y terminó haciendo lo contrario.
“Como no tenía autonomía, como lo eligió el ejecutivo y fue validado por el legislativo puede haber complicidades, no podemos descartar estos comportamientos o la facilidad con las que se cometen”, relató.
Ante ello reiteró que es necesario buscar autonomía de los órganos por principio jurídico, y así cada poder debería tener intocada, o blindada su condición de autonomía y soberanía.