Juan Manuel Jiménez García.
Las Choapas, Ver.
A partir del día 17 de julio del año en curso se llevará a cabo en este municipio, una campaña evangelista denominada “Las Choapas, comprada por la sangre de Cristo”, dentro de las muchas actividades que tendrán, se cuentan eventos en los campos deportivos con la presencia de pastores reconocidos a nivel internacional.
Oración en las iglesias para pedir por la paz de la ciudad, recorridos por las colonias donde se invitará a los habitantes a entregar su vida a Jesús, y desde luego la pinta de bardas con leyendas bíblicas para hacer conciencia de la importancia de la presencia de Dios en el municipio.
Desde hace días, grupos de hermanos de las iglesias locales, pintan estos espacios con el color rojo, que de manera simbólica representa la sangre derramada de Cristo en la Cruz, y según las enseñanzas de las sagradas escrituras, este es el precio que pago Dios por el perdón de los pecados de los seres humanos.
En entrevista con el pastor de la Iglesia Peniel de la colonia Tepito, Jesús Viveros, señaló que nunca se había hecho una campaña de evangelización como esta; “en los pocos años que tengo de pastorear en Las Choapas, no había visto una unión entre las iglesias, y eso demuestra que tenemos una sola visión, que es entregar esta ciudad en las manos de Cristo, y cuando un lugar está bajo la cobertura de Dios, se reciben muchas bendiciones como es la paz social, el empleo, la salud y el saneamiento de la tierra”.
Cita nuestro interlocutor un texto bíblico donde dice que se resume lo que estamos viviendo en estos momentos en el municipio; “En 2 de Crónicas 2:14 dice los siguiente; Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra, esto es lo que nos hace falta buscar la presencia de Dios en nuestras vidas y en conjunto como sociedad.
Por último, nos dice que se pretende que el mayor número de bardas posibles sean pintadas con esta leyenda, porque se tiene que declarar que la ciudad fue comprada, no a cualquier precio, sino con la sangre de Cristo, el Hijo de Dios.
