Madrid. Estados Unidos mostró su oposición al despliegue de tropas serbias en el norte de Kosovo, después de que el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic, anunció que pedirá a la Organizacíón del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) el despliegue del ejército y la policía serbios en Kosovo, en medio de un repunte de la tensión durante las últimas horas en los pasos fronterizos con Serbia.
El representante especial de Estados Unidos para los Balcanes Occidentales, Gabriel Escobar, afirmó que es “categórica” la oposición de Washington a dicho despliegue, en declaraciones a la emisora Radio Free Europe.
“Subrayaré que Kosovo tiene fuertes garantías de seguridad por parte de Estados Unidos, que se manifiestan en la participación en la KFOR”, señaló al referirse a la fuerza internacional de mantenimiento de la paz dirigida por la OTAN en Kosovo.
Escobar, que se encuentra en la región como parte de un esfuerzo diplomático para desescalar tensiones, destacó la importancia de crear una asociación de municipios con mayoría de residentes serbios para generar diálogo.
“La realidad es que necesitamos que todos contribuyan al proceso y que todos contribuyan a la resolución de esta crisis actual. Y más allá de la crisis, debemos comenzar a pensar en un marco más sostenible en el que las comunidades de este país puedan trabajar juntas”, aseveró.
En respuesta, la primera ministra serbia, Ana Brnabic, criticó lo expresado por Escobar como antes lo hizo con las declaraciones de la ministra de exteriores de Alemania, Annalena Baerbock, quien tachó de “inaceptables” los planes serbios.