El vocero de seguridad, Roberto Álvarez Heredia, atribuyó la violencia a “décadas de descuido”, pero dijo que frente a este contexto de inseguridad “las instituciones federales y estatales encabezadas por el gobernador Héctor Astudillo Flores emprenden una lucha día a día contra la delincuencia con estrecha unidad y coordinación”.
Ciudad de México/Chilpancingo, Guerrero.- Asediados por las bandas del crimen organizado, vecinos de colonias del noreste de esta ciudad en donde está la colonia San José y la noche del martes hombres armados incendiaron dos casas y un vehículo, pidieron la presencia de soldados del Ejército, policías federales y estatales, para someter a los criminales que tienen la zona bajo su control.
Habitantes de estas colonias denunciaron que la osadía de los sicarios ha llegado al grado de instalar retenes en los accesos para controlar el paso, sin que las fuerzas de seguridad federal, estatal o municipal hayan intervenido.
En esta zona que abarca desde la parte alta del cuartel de la Policía Municipal hasta la cima del mercado Baltasar R. Leyva Mancilla, los integrantes de una banda del crimen organizado de las que se disputan la plaza de Chilpancingo se posicionó, protagonizó balaceras y revisó vehículos en los accesos de las colonias la noche del martes, y según los vecinos cuando menos tres personas fueron levantadas entre las colonias San José, Pino Suárez y CNOP sección C.
“Anoche aquí fue casi un infierno, nadie podía salir ni entrar después de las 9 de la noche”, contó un vecino de la colonia Ignacio Manuel Altamirano que se encuentra en la parte superior de la Pino Suárez a la salida hacia la comunidad de Huiteco, y a unos 2 kilómetros de la colonia San José, que entre las 9 y las 11 de la noche fue el centro del ataque y en donde fueron incendiadas dos viviendas, una de dos plantas y un taxi.
En esta colonia los habitantes se mostraron temerosos todavía este miércoles, y pocos quisieron hablar.
Los de las colonias vecinas aseguraron que una de las dos bandas delincuenciales que se disputan la plaza en la capital (Los Rojos y el Cártel del Sur) se posicionaron de la zona y que desde el domingo pasado comenzaron a instalar retenes en los accesos, sin que las fuerzas federales y estatales hayan intervenido, hasta anoche después de las 11 cuando terminaron las balaceras.
En uno de estos retenes, contó un vecino, habrían levantado entre las 9 y media y 10 de la noche a tres personas por separado. El retén fue en la calle que comunica a las colonia Atlitenco e Ignacio Manuel Altamirano.
A su vez, vecinos de la colonia Ricardo Flores Magón que se encuentra a menos de un kilómetro del cuartel de la Policía Preventiva, denunciaron que el domingo en la noche, de 9 a 9:30, integrantes de un grupo criminal instalaron un retén en la entrada para impedir el paso a todos los automovilistas durante casi media hora, sin que ninguna corporación haya llegado a retirarlos, mientras los habitantes eran asediados.
Confirmaron que las balaceras se generalizaron en casi toda la zona en donde se encuentran asentadas unas 20 colonias.