Por El Bicho Politicón
La navidad está a la vuelta de la esquina y estoy embargado de su espíritu por lo que no tocaré el tema de las ridículas inauguraciones del Chino, los fantasmas del amor y la paz reinan en mi corazón, claro, también las bebidas espirituosas, que no deben faltar para que el regocijo esté presente.
En algunos videos donde están las ‘multitudes’ que siguen al Chino en sus periplos, lo veo como con nostalgia, como diciendo “¿¡y mi pollo!?”, yo aventuro la teoría de que es algo así: como que “la tenía, era suya y Morena se la quitó” y en lugar de tener ese ‘guardadito’ es sus arcas, lo tuvo que ‘tirar’ en esas obras que ya no estaban en su programación, aunque sí aparecieran en los informes del Orfis.
Ni modo Chino, será para la otra, aunque con el retorno de Renato Tronco se ve muy difícil que gane una soñada diputación… pero ¡qué barbaridad!, maldito alcohol, me traiciona las teclas, yo que no iba tocar ese tema pero ‘ni hablar mujer, trais puñal’…
Qué cosa más bonita eso de ‘la rama’, oiga usted, aunque algunos dicen que ya no es como antes, ya ve que siempre hay gente que añora el pasado, yo soy fan de esa rama, aunque sí, un poco desafinadita, finalmente es tradición que se debe mantener, fomentar, apoyar.
Las posadas, otra muy linda celebración, aunque a decir verdad, casi no veo alboroto aunque si muchos borrachos, ¡pasu!, de todos lados salen competidores, esperamos apoyar a las nuevas generaciones para no dejarles alcohol que tomar, pues a seguirle, salud y que el año próximo la guerra de los Yunes nos regale un gobierno morenista.
Pues eso.
