José Luis Pérez Cruz/
Crónicas del poder
Sólo fue cuestión de horas para que ‘mancharan’ el autonombramiento que se hacía por la tarde.
No pudo articular palabra alguna hasta por 20 minutos.
Como auténtica iguana quedó en estado cataléptico, inmóvil.
Ni tiempo le dio para tirarse al suelo y bailar el son jarocho que tanto le gusta; aunque siguió como iguana. Cataléptico.
El Comandante Supremo de Las Fuerzas Externas de Coatzacoalcos, Víctor Manuel Carranza Rosaldo fue ametrallado por habitantes del Ejido Colorado quienes le exigieron obras, no miserias del plan que pretende activar para este 2019.
“Le están mentando la madre a Colorado”, les gritaba una mujer.
Su ‘tropa’, el escuadrón de Morena, impávido.
La ‘fuerza aérea’, esos ediles aviadores, sólo observaban, eran centinelas de los certeros fogonazos de Enoc Santiago Solano, agente del Ejido Colorado.
Ese sí, como buen ‘Comandante Supremo’ asumió el liderazgo, tomó por asalto el estrado en el salón de cabildo, se fue al frente de batalla y le asestó fulminantes golpes de bayoneta a su homólogo, el otro ‘comandante supremo’ que hacía las veces también de alcalde.
El ‘Capitán’ Miguel Pintos Guillén intentó emular a Juan Escutia y lanzarse con todo y bandera para defender su sesión de cabildo. Lo callaron, tuvo que capitular y el comandante supremo Santiago Solano, reventaba la primera fila de las huestes enemigas.
Fue el ‘escuadrón aliado’ tricolor de regidores el que saltó como primera reserva sobre las líneas enemigas a explicar y dio su parte de guerra en el conflicto bélico entre un ayuntamiento y pobladores de un ejido.
Uno lo hizo por alusión, el otro por buscar mediar.
Siguió la síndica Yazmín Martínez Irigoyen quien sacó la bandera blanca y terminó argumentando de manera clara una posible solución al conflicto.
De ahí dos regidoras, la secundaron. Keren Prot y Eusebia Cortés.
Ya con la ‘mesa de paz’ lista para la negociación el alcalde, habló.
“Si yo tuviera una varita mágica lo haría pero no se puede y no vamos a mentirles, ni darles obras por dar, porque no nos alcanza”, indicó.
Ayer Víctor Carranza, a pesar de sus dichos, demostró que no puede ser ‘comandante supremo’.
Primero porque el término sólo aplica legalmente al Presidente de la República, quien lo ejercerá por sí o a través del Secretario de la Defensa Nacional y del Secretario de Marina-Armada de México.
Si acaso le alcanzará para ser Comandante Supremo de Las Fuerzas Externas de Coatzacoalcos, ésas que afirma buscan desestabilizar su gobierno.
Y en segundo, no puede ser Comandante Supremo porque simplemente no tiene liderazgo, la gallardía para conducir a sus colaboradores y mucho menos los destinos de una ciudad que sigue cayéndose a pedazos.
Comandante Supremo nunca, si acaso soldado raso de ya saben quién.
@joseluisperez67
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