Por El Bicho Politikón
Veo un discurso, al menos, contradictorio en esta Cuarta Transformación… por un lado, todos los días fustiga el presidente sobre que la corrupción es el mal de males en este país –en lo cual concuerdo totalmente-, por otro lado, está la impunidad –de la que ahora es cómplice- con la que quiere tratar el tema.
Pongamos por caso su cruzada contra el huachicol, dijo que el 80% del robo se daba dentro de las instalaciones de Pemex y puro ‘Juan Pérez’ está siendo investigado… ¿de verdad los apellidos Deschamps, Lozoya, Treviño, Peña, Calderón, Fox no han salido a relucir en el robo tan monumental de hidrocarburos? El 20% restante es el que ha sido perseguido de manera feroz y ya tienen a 600 huachicoleros tras las rejas.
Pa´su mecha!, los tiburones corruptos de la administración pasada ahí están, paseándose muy orondos sabiendo que no los van a tocar ni con el pétalo de una rosa.
Algo raro pasa en esta Cuarta Transformación… el líder se aplica de manera casi mántrica en la austeridad republicana, mientras muchos de los de abajo se pasean en autos nada austeros… eso pasa cuando no se entiende de qué lado de la historia les toca jugar, una crisis de identidad donde discursivamente gritan a los cuatro vientos que son austeros y se retiran en sus camionetas blindadas.
No sé usted, pero yo voté por AMLO para ver en la cárcel a los corruptos, pero todo parece que todos los días el presidente se afana en desmarcarse de esa responsabilidad, mientras tanto, su Fiscal no atina si ser un buen funcionario y echarle el guante a los malosos de cuello blanco o hacerle caso a su líder y aplicar el borrón y cuenta nueva…
Pues eso.
