Don Alfonso Pérez pinzón, nacido en el estado de campeche, pero, ¡¡¡auténtico ciudadano choapense!!!

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Las Choapas De Mis Ayeres…

Por Alfredo Bandala

“El que es bueno en la familia es también un buen ciudadano”: Sófocles

Las Choapas, Veracruz. Tierra próspera y llena de riquezas naturales como el petróleo, hule, arroz, maíz, ganado, maderas preciosas y animales silvestres, cuya superficie es de 3, 509.56 km cuadrados, siendo el municipio más grande del estado y de los pocos en el país que colindan con tres estados circunvecinos. Limita con Oaxaca, por el lado de los chimalapas; Con Tabasco, por el lado de   Huimanguillo y con Chiapas, por la sierra madre oriental, con los municipios de Cintalapa y Tecpatán.

La abundancia de petróleo en el subsuelo choapense que conllevó a la generación de miles de empleos en la industria del oro negro, fue la atracción para los ciudadanos de los estados cercanos. Nuestra ciudad que logra ser municipio libre un 28 de diciembre de 1961, se fue poblando por gente trabajadora que lo único que buscaba era un mejor futuro de donde provenían y las Choapas se los ofrecía. En los años 60 y 70 se notó el incremento de la actividad económica.

Al haber bonanza de trabajo en nuestra ciudad, la derrama económica fluyó en automático y empezaron las aperturas de nuevas tiendas y así es como en el año de 1960, año en que se inaugura el puente de Coatzacoalcos, llega un joven campechano con tan solo 26 años de edad.

Nace un viernes 25 de mayo de 1934 en Dzibalchén, Campeche 

Su nombre, Alfonso Pérez Pinzón, quien había llegado primero a Minatitlán y de ahí le encomiendan la apertura de una tienda de venta de materiales y Pinturas Pittsburgh en nuestra ciudad. Esta tienda se ubicó por muchos años en la calle Revolución, justamente a un lado de la casa de la familia Meneses y donde hoy es la pastelería Tita.

Desde que se apertura la tienda de pinturas, el joven Alfonso empezó a tener un trato de amistad con todos los hermanos Meneses Madrigal.  Irma, Salvador, Wilbert, Menandro, Benjamín, Carmelo, Gloria, Lucio y Gabriel, pero fue con Salvador Meneses (+) con quien llegó a identificarse plenamente. Llegaron a ser amigos verdaderos que se veían como hermanos y también se ganó la confianza y el cariño de la Sra. Philadelphia Madrigal de Meneses, mamá de los jóvenes Meneses Madrigal, quien le abrió las puertas de su casa como otro miembro de la familia.

Para el joven Pérez Pinzón era un mudo nuevo llegar a esta zona del sur de Veracruz, pero la necesidad de abrirse camino lo llevó a aceptar cambiar de residencia y cuando llega a nuestra ciudad, se asiste en la comida con la Sra. Guadalupe Reyes, dueña de una tienda de deportes ubicada frente al parque Juárez que se llamó “La Casa del Pueblo”.

Ella era abuela de la Srta. Ma. Luisa Guzmán, quienes desde muy pequeña llegó a nuestra ciudad junto con su hermano el chato, procedente del puerto de Veracruz.

En el trato constante con la Srta. Ma. Luisa, quien era de una edad similar a la de él, se enamoran y empiezan una relación de novios que culminaría en matrimonio para formar una brillante familia. Tienen a sus 4 hijos: Luis Alfonso, Carlos Fernando, Adda Isela y Jorge Luis.

En sus viajes a Minatitlán, donde tenía que reportar las ventas de pinturas Pittsburgh a sus jefes, conoce al empresario Mueblera Amado Guzmán García y le ofrece venirse a trabajar con él y es así como durante 24 años trabajó en esta importante mueblería regional y se hizo cargo de la sucursal de Las Choapas, con 7 empleados a su cargo y ubicada en la calle Revolución, donde estuvo la fraternidad tabasqueña, local que está a un lado donde hoy se ubica Banamex.

La primera mueblería de Amado Guzmán García estuvo muchos años en Av. Hidalgo, locales que eran del Sr. Francisco Toledo Castillejos.

Cuantos gratos recuerdos entre las familias de Las Choapas el acordarse de que fue en esa mueblería donde adquirieron en abonos su primera televisión en blanco y negro, la primera sala, las bicicletas para los niños y todos atendidos por Don Alfonso con esa caballerosidad y amabilidad que siempre le caracterizó.

La mueblería Amado Guzmán García era la más surtida de la ciudad y eso evitaba que los choapenses fueran a Coatzacoalcos a comprar sus muebles, ya lo hacían ahí, situación que hizo elevar considerablemente las ventas al sr Alfonso y tener contento al empresario Guzmán García.

Una vez que se estableció en Las Choapas y que se cerró para él, el ciclo en la mueblería Amado Guzmán García, emprende un nuevo reto en su vida como proveedor de materiales a Pemex. Llegó justo en la época de bonanza de la paraestatal y tardó muchos años con esa actividad la cual tuvo que hacer a un lado cuando a los proveedores les empezaron a atrasar los pagos.  Había trabas para que le asignaran las compras pues ya los metían a concursos para licitar y como persona de retos, decide cambiar de giro, a pesar de la excelente relación con el Ing. Agustín Aceves Ávalos, superintendente del Distrito El Plan.

A partir de 1985 tuvo la franquicia en Las Choapas de las pinturas Sherwin Williams y empezó a meter poco a poco algo de ferretería, hasta que decide independizarse con sus propios negocios y se crea Ferrepinturas Pinzón, donde llegó a tener tres sucursales:  Una en la calle 20 de Noviembre, otra frente al parque Juárez y la de Plan de Ayala que al día de hoy es con la que se quedó y donde comparte la responsabilidad de atenderla con su hijo Carlos. Cierran solo para comer.

Sorprende que, en una zona netamente petrolera, Don Alfonso no formara parte de la nómina de la empresa más fuerte de nuestro país. Muchas veces le insistieron sus amistades de Pemex y de la sección 26 del S.T.P.R.M. a trabajar en Petróleos Mexicanos, incluso, en un inicio le regalaban la ficha, posteriormente, le ofrecían una plaza definitiva pero siempre se fue por el lado de la iniciativa privada. Nunca le llamó la atención trabajar en Pemex, sentía que no era su giro.

Eso sí, llegó a tener una entrañable amistad con muchos petroleros y ciudadanos de Las Choapas que incluso, llegaron al compadrazgo como Salvador Meneses (+), Chito Zapién, Adolfo Aguilar Vizcarro (Napo +), Pedro Morales, Samuel Cortés, Beto Piñones (+), Cesáreo Rosas (+), Emilio Ramírez (el pájaro), Luis Caudillo, Candelario Flores, Ramón Martínez Gómez. José María Sastré, entre otros.

Se siente agradecido con la tierra que le dio la oportunidad de forjar un futuro, una familia, un hogar y se siente más veracruzano que campechano.

Cuando sus hijos eran muy pequeños, sufrió la pérdida de su esposa y ese gran dolor se fue asimilando por el gran amor a sus hijos y procurar hacerlos unos hombres de provecho. Nunca pasó por su mente irse de Las Choapas ante una situación de dolor y angustia, tenía un objetivo muy claro: sacar a sus 4 hijos adelante.

Sus hijos, son de los jóvenes más populares de Las Choapas porque crecieron con valores y tienen amistades al por mayor. Ese logro de Don Alfonso por sacar adelante a sus hijos ante tan dura adversidad es de aplaudir y se ha ganado el respeto y admiración de la sociedad choapense.

Don Alfonso, con ese corazón noble y altruista que le caracteriza, fue de los fundadores junto con su compadre Antonio Córdova y el Dr. Juan Montes Zavaleta del Club de Leones en nuestra ciudad y de los principales promotores de actividades altruistas para ayudar a tanta gente necesitada.

A más de 60 años de haber llegado a nuestra ciudad, Don Alfonso no olvida sus raíces y cada año visita su tierra natal. Acude en compañía de su hijo menor, Jorge Luis, a las festividades anuales de Dzibalchén, Campeche donde es recibido como un hermano por su compadre y amigo el Profr. Manuel Pacheco González.

En la ciudad de Campeche viven sus hermanos José del Carmen y Madrileña. En la ciudad de México, vive su hermano Rafael.

Muchos de sus sobrinos provenientes de su tierra probaron suerte de radicar y trabajar en Las Choapas, él los recibía con todo el amor de sangre en su casa y fue solamente su sobrino Fernando López, el popular Campechano, quien se adaptó. Se casó con la Srta. Mercedes Nacif Bribiesca, nativa de Las Choapas y tuvieron tres hijas: Mónica, Mercedes y Maritza (+)

El campechano llegó de soltero a Las Choapas, aquí se casa, nacen sus hijas, firma planta, y es parte fundamental en la directiva del equipo de futbol de la sección 26 de la tercera división profesional. Se jubila y se va a radicar a la ciudad de Campeche donde desafortunadamente fallece.

Las Choapas, Veracruz tierra bendita que nos viste nacer y que arropaste a tanta gente trabajadora que llegó de diferentes partes del país para asentarse y hacerte próspera. Gente como Don Alfonso Pérez Pinzón que vino a lo que vino, a trabajar y formar una familia de choapenses de bien. Poncho, Carlos, Coqui, Adda, amigos de muchos amigos, mis amigos de la infancia.

El Sr. Pérez Pinzón conoce a cada uno de los amigos de sus hijos y hoy, cuando tenemos la oportunidad de pasar sobre la calle Plan de Ayala y lo vemos desocupado, no perdemos la gran oportunidad de pasar a saludarlo y tener una charla muy amena con él. De verdad que es un deleite platicar con él.

Que dichosos de tener un padre como el que les tocó. ¡¡¡Felicidades!!!

RESPETUOSAMENTE

JOSE ALFREDO BANDALA ALMEIDA

Agradezco el apoyo de Jorge Luis Pérez Guzmán por darme la información para la realización de mi crónica.

HAGÁMOS QUE MÁS CHOAPENSES CONOZCAN UNA PARTE DE LA HISTORIA DE NUESTRA CIUDAD COMPARTIENDO LA PRESENTE PUBLICACIÓN!!!

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