Paradoja: producimos pocos súper ricos y muchos súper pobres.

Un estudio realizado por el profesor del ITAM, Miguel del Castillo, nos vuelve a recordar algo que es por todos conocido, pero que sin duda duele y preocupa: la desigualdad en México es uno de los problemas mas asfixiantes que afectan al país. Sólo El 1% más acaudalado de la población mexicana posee la tercera parte de la riqueza nacional y el 10% las dos terceras partes de los activos totales.

El estudio del profesor Del Castillo fue elaborado para la CEPAL (brazo de Naciones Unidas para el desarrollo económico de América Latina y el Caribe) y fue presentado este lunes en el Senado.

Pese a estos niveles de desigualdad en México no hay un impuesto específico sobre el patrimonio o las herencias.

“El problema no es la riqueza (80.6 billones de pesos, cuatro veces el PIB en México) sino cómo se genera y, sobre todo, cómo se distribuye”, indicó Del Castillo.

En el evento Miguel del Castillo estuvo acompañado por el coordinador de Investigación del Instituto Belisario Domínguez, Gerardo Esquivel y por el director ejecutivo de Oxfam México, Ricardo Fuentes Nieva.

Si el monto total de activos se distribuyese de manera equitativa entre todos los mexicanos, cada uno tendría un patrimonio ligeramente inferior al millón de pesos (56.300 dólares) una cantidad “más que suficiente” para tener una vida holgada.

“México es un país con mucha riqueza natural, tiene minerales y petróleo, una extensa costa,  recursos hídricos, bosques y suficiente superficie agrícola para alimentar a sus habitantes”, dijo Del Castillo.

Pero la realidad es otra, pues uno de cada cinco mexicanos pasa hambre, el salario mínimo diario (80 pesos o 4.5 dólares) no es suficiente para alimentar a una familia y más de la mitad de la población no ingresa lo suficiente para comer correctamente y acometer los gastos básicos de salud, educación, vestido, vivienda y transporte.

Esto contrasta con el hecho de que México es miembro de la OCDE desde mediados de los noventa en el que entre 125 mil y 200 mil personas tienen más de un millón de dólares de patrimonio y en el que 800 residentes poseen activos por valor de 50 millones o mas.

México es la segunda nación mas poblada de América Latina solo por detrás de Brasil, está entre los 20 países con más millonarios del mundo y entre los 15 en los que más personas no pueden alimentarse correctamente.

La  inequidad aumenta sobre los activos financieros, dinero e inversiones financieras y se aíslan los físicos, casas, terrenos, automóviles y diversos bienes del hogar.

En ese caso el 80 por ciento de la riqueza está en manos del 10 por ciento más acaudalado.

Los capitales privados han crecido más que el PIB.

En poco mas de una década, la riqueza total mexicana ha crecido a una tasa promedio anual del 8 por ciento y ha pasado a suponer algo más que el doble del PIB a más que cuadruplicarlo, en contraste la economía mexicana creció un 2.6 por ciento anual en el mismo periodo, una cifra reducida para tratarse de un país emergente y en el que la población no deja de aumentar.

En el sector empresarial la distribución patrimonial también es desigual, el 10 por ciento de las compañías mexicanas concentran el 93 por ciento de los activos físicos, mientras el 90 por ciento restante ostentan muy pocos bienes de capital.

Para la realización de este estudio Miguel Del Castillo ha empleado hasta cinco fuentes de información, el sistema de cuentas nacionales, censos económicos, censos administrativos, encuestas de activos de los hogares y estudios sobre desigualdad de varias instituciones privadas y bancos.

(Con información de El País)