Redacción
Con una promesa de encabezar una “nueva era” en la FIFA, Gianni Infantino fue elegido el viernes como nuevo presidente del maltrecho organismo rector del fútbol mundial.
Entre las propuestas del suizo para acceder a la presidencia del organismo, se encuentra la promesa de nombrar a un africano como secretario general de la FIFA.
Asimismo, Infantino adelantó que cada federación recibirá cinco millones de dólares en un periodo de cuatro años para invertir en proyectos de desarrollo.
Por otra parte, el nuevo presidente de la FIFA había garantizado “transparencia absoluta” en los procesos de elección de sedes para la Copa del Mundo, así como en la licitación de los contratos comerciales y los pagos a sus directivos.
En una de sus propuestas más llamativas, Infantino dijo que impulsará una Copa del Mundo con 40 participantes, a diferencia de las 32 que integran el formato actual, así como un sistema de rotación de sedes para asegurar que no se realicen dos mundiales consecutivos en la misma confederación.
Finalmente, buscará la creación de un equipo con leyendas del futbol que realice partidos benéficos para apoyar a diferentes fundaciones.
El suizo se convirtió en el noveno presidente de la FIFA y sucede a Joseph Blatter, quien ocupó el trono ininterrumpidamente desde 1998 y renunció en medio de un abarcador escándalo de corrupción.
Infantino, secretario general de la UEFA, recibió 115 de los 207 votos en la segunda ronda de la votación, para superar los 88 votos del jeque Salman.
