Villa Cuichapa, Ver.
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En un emotivo evento, acompañados de compañeros maestros y autoridades municipales, los profesores Felipe de Jesús Lagunas Brito y Rosa María Cruz Vivas, fueron homenajeados al haber alcanzado su jubilación tras haber servido 38 y 27 años respectivamente en la Escuela Secundaria “Dr. Alfonso G. Alarcón”.
Maestros y alumnos organizaron un evento en donde destacaron las palabras de agradecimiento por las enseñanzas dadas durante los años que sirvieron como educadores.
Por ello, los estudiantes prepararon poesías, canciones, dedicaron mensajes de agradecimiento en cartulinas y mantas. Por su parte, las autoridades municipales entregaron reconocimientos a ambos por su importante labor, la cual, logró que muchos estudiantes hoy sean profesionistas.
El profesor Felipe de Jesús, quien en los últimos años fungió como director de la institución educativa, dijo que llegó a Cuichapa un 16 de octubre del año de 1972, su llegada a la escuela fue como prefecto, esto luego de haber recibido la oportunidad de trabajo de parte del hijo del Dr. Alfonso G. Alarcón, el profesor Guillermo Alarcón que en ese entonces era el director de la escuelas secundarias generales.
Posteriormente impartió 14 horas de ciencias naturales, 9 como ayudante de laboratorio, tiempo después, Napoleón Espinoza Hernández, el cual fue el segundo director de la escuela, le dejó 16 horas de matemáticas, ya que él tenía la especialidad en esa materia, además de la disposición de trabajo.
Lagunas Brito dijo que estudió en la Universidad Autónoma de Guerrero, de donde es nativo, narró que en ese entonces para obtener trabajo tenían que acudir hasta la ciudad de México, al hacer el viaje junto a cinco compañeros maestros, conoció al subdirector de educación a nivel nacional, Julián Rodríguez Salazar, quien sin saber que era maestro le pidió que fuera a buscar café y galletas, esto le valió para que él y sus compañeros evitaran una enorme fila para ser entrevistados.
Al haber solicitado empleo la recibió 15 días después por medio de telegrama, sin embargo, al formar parte de un grupo musical del que era vocalista, al tener que cumplir con contratos, ya que de lo contrario enfrentaría problemas legales, no pudo irse hasta el estado de Chihuahua como promotor agropecuario, por lo que solicitó que uno de sus compañeros ocupara el puesto, este le dijo que le devolvería el favor.
Durante su estancia en la secundaria, luego que al maestro José Roberto López Manrique ocupara el cargo de subdirector, le dejaron a su cargo la banda de guerra porque ya sabía tocar, eso le trajo como recuerdo que su antecesor le decía a su alumnos que hacían la prueba, “que tocaban feo pero con mucho sentimiento”.
El profesor dijo que aunque sus raíces son guerrerenses se siente más veracruzano, ya que aquí hizo su vida, conoció a su esposa, nacieron sus hijos, por lo que al llegarle su hora de partir de este mundo, pedirá que sus restos se queden en esta tierra que le dio cobijo y grandes vivencias.
Junto a su esposa, la maestra Rosa María, quien impartió la clase artes, fueron felicitados por sus alumnos, quienes les dieron muestras de afecto.
