Jackie, protagonista de una foto que le dio la vuelta al mundo por su acto maternal, era en realidad un macho

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Jackie ya era conocido en  Fragoselo por merodear en la zona. Debido a su carácter, los vecinos aseguran que es muy probable que lo que el cuerpo que llevaba en sus fauces en la fotografía, fuera su cría.

Ciudad de México, 24 de octubre (SinEmbargo).- Hace unos días circuló una fotografía en redes sociales que mostraba lo que se pensaba era una perrita huyendo de las llamas del incendio que consumió el monte Fragoselo en España. La imagen era aun más conmovedora porque el animal llevaba en su hocico un cuerpecito carbonizado, que se pensaba era su cría.

La imagen maternal de la perrita le dio la vuelta al mundo, dando muestra del poderoso instinto sobreprotector de esta especie. Sin embargo, según reporta el diario El País, se trató en realidad de un macho de nombre Jacki, quien valientemente rescató cadáveres de animales carbonizados que después enterró en un paraje no consumido por el incendio.

La fotografía fue capturada por el fotoperiodista Salvador Sas y difundida por la agencia EFE como “foto del día”, lo que permitió que rápidamente se distribuyera en medios de comunicación de todo el mundo. La imagen saltó como pólvora a las redes sociales transgrediendo la barrera del lenguaje y causando gran conmoción entre los usuarios.

De acuerdo con el reportaje de Silvia R. Pontevedra varios vecinos de Coruxo señalaron que el pequeño cuerpo que lleva en su hocico, si era en realidad su cría pues “porque venía del lugar donde tenía una camada con una perra y a algún otro cachorro sí lo consiguió salvar”, aseguraron los testigos.

El propietario del Jackie, el perro, asumido hembra por error, teme que el interés causado de manera internacional pueda generarle fama excesiva al canino y por tal motivo se niega a aportar su nombre y apellido en las entrevistas.

Jackie no solo salvó a sus crías, sino también a otros animales del bosque que quedaron carbonizados por el fulminante incendio. Al ver la terrible escena de lo que habría sido hasta hace unos días su territorio completamente vuelto cenizas, el pequeño animal se armó de valor para internarse en el bosque y cargar con su hocico a todos los cadáveres que pudo.

De acuerdo con los testigos, el perrito realizó varios agujeros en el terreno contiguo a una iglesia que se salvó de las llamas, donde depositó los cuerpos que encontró debido a su costumbre de enterrar huesos.

Los habitantes de Fragoselo aseguran también que el perro más tarde extendió su territorio de rescate ya que la fotgrafía se le tomó en una localidad contigua a la que solía ser su vecindario.

El fotógrafo se encontraba en el lugar para retratar a un funcionario español, y hasta su arribo ningún otro periodista había notado la presencia del canino. Jackie pasó dos veces junto a ellos con el cadáver en su hocico y fue entonces que el periodista lo notó.

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