Si observas que los cosméticos u otros productos estéticos te están haciendo daño, revisa de dónde viene el problema.
Si el delineador hace que te lloren los ojos, si la base que te aplicas para el rostro te provoca espinillas y el tinte que usas para cambiar el color de tu cabello te causa dificultad para respirar, todo podría ser parte de lo mismo: una reacción a los componentes químicos de los productos que estás utilizando.
Como todos queremos lucir bien y conservar una apariencia juvenil; la industria cosmética sigue sacando al mercado productos para mejorar y embellecer cada parte de nuestro cuerpo. Hay productos para cada necesidad, cada gusto y presupuesto. Pero todos incluyen en su composición una lista de ingredientes que solamente les resultan conocidos a los ingenieros químicos.
Los de cuidado Entre los químicos que se recomienda evitar se encuentran el formaldehido y la queratina, presentes en los productos para alisar el cabello; la hidroquinona, que se usa bajo supervisión médica; los ftalatos que a veces se encuentran en champú o jabones; y los parabenos, presentes en algunos desodorantes y antitranspirantes.
Debido al riesgo de desarrollar estas reacciones, han surgido nuevas opciones, y en los últimos años han aumentado en el mercado los cosméticos y los productos de higiene personal que se conocen como ecológicos y/o naturales que no contienen componentes tóxicos.
Evita que te hagan daño:
-Revisa de vez en cuando la fecha de vencimiento de los productos que tienes.
-No uses rimel que se haya secado. No trates de suavizarlo con agua o saliva. Cuida tus ojos.
-Guarda los cosméticos en un lugar fresco para evitar que el calor cause cambios químicos en la fórmula.
-Usa cada producto para su función (el labial en los labios, no en los ojos para evitar la contaminación).
Medidas:
REVISA LA ETIQUETA
Corrobora que el producto incluya la etiqueta de Nomenclatura Internacional de Ingredientes Cosméticos (INCI en inglés), donde los fabricantes están obligados a describir en detalle el nombre de los componentes. Así te aseguras de que estás comprando algo de calidad.
OPCIONES NATURALES
Busca una alternativa más natural. Por ejemplo, para evitar usar productos con queratina para alisar el cabello, que pueden provocar reacciones en la piel y asma, puedes hacerte un planchado natural con calor. Es menos duradero, pero es más saludable.
CUIDA LOS TINTES
Algunos estudios sugieren que el uso continuo de tintes, puede aumentar el riesgo de desarrollar leucemia, linfoma o cáncer de mama, pero no hay evidencia definitiva. Ante la duda, una opción más segura es utilizar productos a base de tinturas vegetales.
BRONCEADO ARTIFICIAL
Las camas solares aumentan las posibilidades de que desarrolles cáncer de la piel. Como alternativa puedes utilizar cremas de autobronceado, donde no necesitas exponerte al sol. Y cuando te asolees aplícate protector solar, aunque estés usando un autobronceador.