Por El Bicho Politicón
Continuando el pedido de ayer acerca de la policía estatal y de los elementos de tránsito, hoy haremos la siguiente reflexión… como particulares, sí contratamos a un arquitecto para que nos diseñe una casa de dos plantas con sala, comedor, cocina, 4 habitaciones, 3 baños y nos trae unos planos de una choza, nos agrede y se roba el material para la construcción, pues como que no se ganó sus honorarios.
En sentido amplio, nosotros, el pueblo, somos los jefes últimos de las corporaciones policiacas, sí estas hacen un trabajo deficiente, en el mejor de los casos, pues los despedimos, pero si andan delinquiendo… pues a la cárcel, no puede ser que vengan nos roben, nos golpeen, nos desaparezcan y además ¡les paguemos su quincena!
Como muchas cosas que suceden en este país, la seguridad es una pura y llana simulación… me platicaba un elemento policiaco que en alguna ocasión, por quererlo ‘joder’ su jefe lo mandó a cierta plaza… “pendejo de mi jefe, ahí me hice de un carro del año y de mi buena casa, solo con lo que dejaban los polleros”. Así está la seguridad, ‘policías’ buscando vías alternas para ganar dinero… corruptos pues.
Y así los pueden encontrar a lo largo y ancho del territorio nacional… unos con cuotas de los traficantes de indocumentados, otros con moches de traficantes de drogas, unos más con ‘mordidas’ a los automovilistas, moches de los huachicoleros y un larguísimo etcétera… ¿y la seguridad? ¿Qué es eso? ¿Con qué se come?
Lo he dicho en anteriores columnas… no se puede esperar nuevos resultados haciendo lo mismo, además no hay nada que inventar, las estrategias ya están hechas, pero ¿quién las pone en acción?
Y recalco… ya basta de ladrones y criminales con uniforme.
Pues eso.