Promete ser un espectáculo brillante y se apreciará en América y Europa.
Ciudad de México
El cielo se engalana también por estas fechas navideñas, aunque en realidad llega un poco antes que Papá Noel. Tras haber disfrutado de otra súper Luna hace unos días, esta semana esperamos poder observar las Gemínidas, una de las mayores lluvias de estrellas que se producen al año en nuestro firmamento.
Tal y como ocurre con las Perseidas, que nos suelen visitar en verano, nos cruzamos con estos meteoros una vez al año, aunque en este caso se da por estas fechas (en torno a mediados de diciembre). Al ser una lluvia de actividad alta no es estrictamente necesario recurrir a instrumentos, pero siempre puede mejorarse la experiencia de visualización con una serie de recursos o prácticas.
¿Cuándo y cómo verlas?
Las Gemínidas nos visitarán los días 13 y 14 de diciembre, siendo el máximo esplendor hacia la media noche en Europa (23:00 en Canarias, 0:00 en la Península, 17:00 en México, 18:00 en Colombia y 20:00 en Argentina).
Siempre es mejor alejarse de la contaminación lumínica de los núcleos urbanos
Como solemos recordar para estas actividades, siempre es mejor alejarse de la contaminación lumínica de los núcleos urbanos. Como hemos comentado suele ser una lluvia bastante activa, con una actividad que supera los 100 meteoros por hora, pero no está de más ir con una dosis extra de paciencia para ese momento de sentarnos y mirar a un punto fijo del firmamento nocturno esperando su aparición.
Por su parte, la Sociedad de Observadores de Meteoros y Cometas de España (SOMYCE) matiza que el máximo de actividad se espera el día 14 de diciembre sobre las 6:30 UT (hora local en Canarias, 7:30 en la Península, 0:30 en México, 1:30 en Colombia y 3:30 en Argentina). La asociación aconseja que el centro de visión esté alejado uno 30 grados del radiante (cerca de las estrellas Cástor y Pollux en Gémini), siendo las constelaciones de Tauro, Orión y Can Mayor las más adecuadas.
Las gemínidas se pueden observar a simple vista, sin necesidad de ningún instrumento, pero es recomendable apagar las luces y dar a los ojos el tiempo necesario para adaptarse a la oscuridad, como señala la NASA.
Esta lluvia de estrellas parece surgir de la constelación de Géminis, de la que toma su nombre, y es uno de los espectáculos más interesantes e intrigantes de todo el año tanto para los investigadores como para los observadores aficionados.