Greenpeace dijo que la expresión alude a que el País no tiene mucho qué celebrar en el Día Mundial de los Humedales.
En conmemoración del Día Mundial de los Humedales, activistas de Greenpeace México arribaron a la sede del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) para expresar su luto por la devastación de manglar ocasionada por el proyecto Malecón Tajamar, en Cancún, Quintana Roo.
Vestidos de negro, unos cuarenta integrantes de la organización ambientalista instalaron montículos de tierra con cruces blancas para simular tumbas en memoria de la flora y la fauna devastada por la tala de 57 hectáreas de mangle durante la madrugada del pasado 16 de enero.
Durante la manifestación fue exhibida una manta con la leyenda “Luto por #Tajamar”.
Miguel Rivas, campañista de Océanos de Greenpeace México, explicó que la expresión de luto alude a que el País no tiene mucho qué celebrar en el Día Mundial de los Humedales.
“Este día se conmemora el Convenio Ramsar que protege todos los humedales, el manglar es una parte importante del humedal y en Tajamar fue destruido el 16 de enero, 57 hectáreas que Fonatur pidió permisos irregulares para desmontar este manglar que presta una serie de servicios ecosistémicos a la población de Cancún. Esta actividad es un luto porque lo que ocurrió en Tajamar es absolutamente una devastación ecológica”, manifestó.
El Proyecto Malecón Tajamar, promovido por el Fonatur, actualmente se encuentra suspendido por una orden judicial que se prevé sea resuelta mañana, cuando un juez decida si autoriza o no la construcción de edificios y hoteles en la zona o bien, si se opta por restaurar el manglar.
Frente a este escenario, Rivas hizo un llamado a que se opte por la cancelación del proyecto.
“Nosotros lo que queremos es que el permiso se suspenda definitivamente, que ya no haya continuación ni relleno y que dejen que el manglar se recupere naturalmente aunque esto tarde”, agregó.
Guillermo Haro, procurador federal de Protección al Ambiente, reconoció la semana pasada que el Fonatur incumplió con el programa de reubicación de fauna que estaba obligado a concluir previo al desmonte del manglar en la zona del proyecto Malecón Tajamar.
Llevan denuncias a Profepa
En Cancún, una agrupación ambientalista presentó hoy 916 denuncias populares por la destrucción ocurrida en el predio del Malecón Tajamar, el 16 de enero pasado.
Las demandas fueron entregadas en la delegación de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Para resaltar el ecocidio y el impacto causado a los habitantes, integrantes de la asociación “Salvemos Manglar Tajamar” acudieron vestidos de negro, en señal de luto.
una de las representantes del grupo, Araceli Domínguez Rodríguez, dio respuesta a la versión del Procurador Haro, del 28 de enero, quien afirmó que en el caso no hay indicios de daños ni responsabilidad ambiental.
La activista calificó de inaudito e inadecuado que la Profepa pretenda minimizar el daño al manglar.
“Profepa manipula la información al hablar de la fauna de la zona de influencia y no de las 59 hectáreas de Malecón Tajamar, argumentando que ninguna está en peligro de extinción”, agregó.
“Salvemos Manglar Tajamar denuncia que Semarnat (Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales) determina equivocadamente la zona de manglares, haciendo una descripción incompleta.
“La descripción que leemos en el Programa de Rescate de Flora y Fauna del 2006 es de un humedal, tal como se describe en la NOM-022: para efectos de la norma humedal costero será entendido como las unidades hidrológicas integrales que contengan comunidades vegetales de manglares”, puntualizó.
Con base en las declaraciones del titular de Profepa y a modo de conclusión, solicitó la inmediata revocación de la autorización de impacto ambiental del 2005 al proyecto.
El proyecto utiliza, afirmó, información manipulada y falsa sobre la condiciones reales del ecosistema de humedal en la MIA, por incumplimiento de la condicionante de reubicación de fauna y por el relleno de algunas zonas, como primer paso a la construcción sin una MIA de por medio.
“La MIA y el cambio de uso de suelo forestal a nombre de Fonatur fue base para que a los propietarios a título personal se le concediera la autorización de chapeo y desmonte de la Dirección General de Ecología del Municipio Benito Juárez”, acotó Domínguez Rodríguez.
El 4 de agosto de 2015, “Salvemos el Manglar de Tajamar” promovió una primera denuncia colectiva que acompañó con 4 mil 333 firmas.
Este martes también se cumplen nueve años de que entró en vigor el Decreto del Artículo 60 TER, incluido en la Ley General de Vida Silvestre, el cual protege a los manglares mexicanos, al prohibir toda obra o actividad que dañe el flujo hidrológico de este ecosistema.
El manglar es una de las vegetaciones propias del ecosistema de humedal que contribuye a regular el ciclo del agua y alberga una gran biodiversidad.
En la actualidad, México ocupa el segundo lugar en humedales de importancia internacional con 142 sitios registrados ante la Convención Ramsar, pero, de acuerdo con Rivas, estos ecosistemas están sometidos a la presión que ejerce el desarrollo turístico e inmobiliario.