Jenni se espantó, no entendía la razón por la que su cuerpo se había pintado de un tono similar al de la bruja del Mago de Oz.
La belleza no solo duele, a veces también puede avergonzar a las personas. Justo como le pasó a Jenni Coleman.
De acuerdo con el testimonio que la mujer brindó a The Sun, después de una sesión de bronceado terminó con un color demasiado peculiar.
Coleman, de 35 años, aseguró que después de aplicarse un aerosol de bronceado quedó de un color verdoso al estilo “bruja”.
La mujer contó en sus redes sociales que un día simplemente decidió usar uno de los frascos de bronceado que tenía almacenados.
En un primer momento su color era el de una persona que pasó varias horas al sol, pero al despertar a la mañana siguiente su piel era de un tono verde marciano o verde bruja.
Jenni se espantó, no entendía la razón por la que su cuerpo se había pintado de un tono similar al de la bruja del Mago de Oz o incluso como el ogro Shrek.
“Cuando me desperté, no lo podría creer. Casi lloro, de hecho sí me parecía a una bruja”, dijo la mujer.
El bronceado en aerosol que utilizó Jenni resultó estar caducado y estuvo almacenado mucho más tiempo del indicado.
“Tomó varios días poder quitarme el incómodo color verde, pensé que nunca se iría. Me tuve que esconder durante una semana para poder quitarme el bronceador”, dijo Coleman.
Su familia le hizo burlas por mucho tiempo, pues parecía que era el personaje perfecto para protagonizar alguna cinta infantil.
La madre de familia contó que esta es una de sus rutinas de belleza más comunes, por lo que resultó completamente extraño haberse vuelto de color verde.
