Kevin, de ocho años de edad se quitó la vida luego de que su abuelo le quitara el teléfono celular a condición de que conviviera con la familia; el incidente ocurrió en un domicilio ubicado sobre la calle Nopal de la colonia Atlampa, en la alcaldía en Cuauhtémoc.
De acuerdo con declaraciones de su familia que quedaron asentadas en la Carpeta de Investigación FAZ/AZ-4/UI-1S/D/03778/09-2019-R1 iniciada por el por el delito de homicidio culposo por otras causas, el menor, enojado se levantó de la mesa y subió a su habitación.
Ante su enojo, sus familiares lo dejaron pues pensaron que se trataba de otro capricho más del menor, de las que ya estaban acostumbrados, minutos después escucharon gemidos y que “rompían y aventaban cosas”; sin embargo nadie prestó atención.
Fue hasta las 20:00 horas del 10 de septiembre, la hermana de Kevin subió a su cuarto para ver cómo estaba pero lo encontró inconsciente.
En ese momento su familia lo traslada al hospital para su atención médica, sin embargo, llegó sin signos vitales y con una marca en el cuello.
Kevin, se asfixió con las agujetas de uno de sus tenis, la cual se enroscó en el cuello y amarró a su cama; ejerció tanta presión que en cuestión de dos minutos acabó con su vida, de acuerdo con los resultados del primer peritaje realizado por la Policía de Investigación.
