Por El Bicho Politikón
El presidente dice que no lo comparen con anteriores gobiernos y pues él puede pedir lo que quiera pero hay algo muy importante, es a base de comparación que podemos hacer una evaluación de las distintas administraciones.
Si en el pasado había elementos que eran presuntos actos de corrupción y en la presente administración esos elementos continúan intactos, suena vacío el discurso sobre el combate a la corrupción, por más datos que tengan en presidencia, la realidad es terca y se presenta en cada trámite de gobierno.
Resulta de particular relevancia la explicación del longanizagate por parte de la oficina de comunicación de la presidencia en el sentido de que era sólo una previsión de compra; ¿pues qué no revisan lo que publican? Y lo absurdo de Andrés: “yo ni como longaniza”.
Me parece, una vez más, sintomático del reverendo desmadre que se trae la 4T en todos los rubros… hasta es increíble que las cosas no se encuentren peor de lo que se ven, seguro es por algún neoliberal que sigue aguantando vara en éste gobierno tan bipolar.
Y es que de verdad, ningún plan de ajuste mandado por el FMI ha sido tan devastador como la austeridad republicana de la 4T… ‘adelgazar’ al estado es una de las demandas más importantes de los neoliberales de hueso colorado, y ahora es una realidad con un gobierno de izquierda, ya estoy viendo a los intelectuales tratando de bautizar a esta forma de hacer política.
Por un lado está el estado flaco y por otro tenemos que es un estado que quiere ser omnipotente y omnipresente, vaya incongruencia, si no se trata de poner orden en Macuspana, además de que se tienen recursos económicos muy limitados, cosa que a AMLO le tiene sin preocupación.
Pero el Tlatoani pide que no lo comparen, que eso sí lo calienta, ¿pues cómo piensa entonces pasar a la historia como el mejor presidente de México? Sólo que sea por una de sus encuestas patito o será a mano alzada entre sus seguidores. De otra manera y sin puntos de comparación, la longaniza la compraban muy cara en el gobierno de Peña.
Pues eso.