Por El Bicho Politicón
Pues qué le cuento, también en el Congreso de la Unión se pusieron a la venta algunas posiciones… no lo digo porque sea algo nuevo, lo comento porque con eso de que llegaron los que van a ‘comandar’ la cuarta transformación, creí (ingenuamente) que las concerta-sesiones habían quedado en el salinismo.
Pues no… me equivoqué. Resulta que el gobernador de Chiapas, ese demócrata que modificó la constitución de su estado solo para pedir licencia un rato en lo que iba a tomar protesta como senador, puesto al que también pidió licencia para regresar a gobernar Chiapas… que qué pasa por la cabeza de Manuel Velasco… miércoles es cuando escribo esta columna.
-Le cambiamos su licencia por cinco diputados, mi gober…
-Hecho, al rato regreso, nomás me despido de los chiapanecos, que sin mí están perdidos, mientras ‘ay’ les dejo a mi suplente.
Y listo, un gober con licencia y ahora senador con licencia, pero que mañana será nuevamente gobernador sin licencia… y Morena ¡relajada, relajada!, con sus cinco diputados más que le dan mayoría… ¡qué barato!
Pues ahí estaba checando mi Facebook y un ejército de morenistas escribiendo que eso se llama ‘hacer política’ y los que no saben de política… pues no entienden que es algo necesario para que La Cuarta camine, ¡caray!, y este Bicho que creía saber de política y esa movida morenista le parecía por lo menos ‘sospechosista’, pero un preclaro genio del morenismo me aclaró los puntos diciendo que si lo hizo morena estaba bien hecho y quien pensara distinto pues era parte del PRIAN.
No pues sí, ya me imagino las pataletas que tendrían esos mismos de haber sido un movimiento, no sé, de Yunes… como todo Bicho de izquierda que se respete en estos tiempos, pongo a Dios por testigo de mi dicho.
Qué más le puedo contar, ya sé, ese tribuno sin par que es Fernández Noroña se la interpeló a Muñoz Ledo y le reclamó no haberlo defendido cuando la ‘polecía’ le daba sus macanazos por querer entrar a la fuerza al (des)informe de Peña, evento al que no estaba invitado valga decir, y mientras le daban sus ‘catorrazos’ a Gerardito, pues Muñoz junto con Batres pasaron muy bien vestiditos a la gala del corrupto presidente y voltearon con cara de ‘fuchi’ a ver a su compañero de sector y de partido, y hasta parece que le gritaron “chusma, chusma”.
Ni tardo ni perezoso Gerardo llegó a su curul a reclamarle a mi abuelito Muñoz, quien como aquel monstruo de la ‘polaca’: ‘ni lo vio, ni lo escuchó’.
Así las cosas entre los tribunos de la alta política y de La Cuarta…
Pues eso.
