Luego de un enfrentamiento verbal entre el Papa Francisco y el candidato republicano, Donald Trump, el portavoz de la Santa Sede, Federico Lombardi, dijo que el Pontífice no quiso hacer un ataque personal ni una indicación del voto cuando sostuvo que la construcción de muros no es de cristianos.
“El Papa ha dicho aquello que ya sabemos bien, si seguimos sus enseñanzas y sus posiciones: que no se puede construir muros, sino puentes. Esto lo dice siempre, continuamente, lo ha dicho respecto a la cuestión de las migraciones en Europa y otras muchas veces”, subrayó en una entrevista concedida hoy a la Radio Vaticana.
Para el portavoz vaticano, esta afirmación es una actitud coherente con las indicaciones del evangelio sobre acogida y solidaridad.
“Naturalmente sus declaraciones han sido posteriormente muy comentadas pero no querían ser, de ningún modo, un ataque personal ni una indicación del voto”, zanjó.
Lombardi agregó que el Papa Francisco dijo claramente que no entraba en la cuestión del voto en la campaña electoral de Estados Unidos y también que sus palabras eran pronunciadas en el caso de que fuera exacto y verdadero aquello que le habían referido.
“Dio el beneficio de la duda respecto a aquello que le refirieron sobre las expresiones (pronunciadas por) el candidato republicano”, señaló.
“Construir puentes en lugar de muros es característico de este pontificado. Tiene que ser interpretado y entendido en este sentido”, agregó.
En su vuelo de regreso a Roma, luego de su viaje de seis días a México, el primer Papa latinoamericano aludió a Trump, al advertir que levantar muros “no es cristiano”, porque está en contradicción con las enseñanzas de Jesús.
“Una persona que piensa sólo en hacer muros, sea donde sea, y no tender puentes, no es cristiano. Eso no está en el evangelio. Sólo digo: este hombre no es cristiano si es que dice esto, hay que ver si dijo así las cosas, y doy el beneficio de la duda”, agregó Francisco.
En su respuesta inicial, Trump sostuvo que “están usando al Papa como peón y deberían avergonzarse cuando hay tantas vidas en juego y la inmigración ilegal es tan generalizada”.
“Estoy orgulloso de ser cristiano y como presidente no permitiré que el cristianismo sea atacado consistentemente y debilitado”, señaló Trump.
