Historias de mentiras, de impunidad…
Coatzacoalcos Ver.-
Juan Antonio Valencia
El lunes 25 de agosto – filtraron fuentes de la PGJE – fue detenido presuntamente por la policía ministerial, Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez, por su presunta participación en el secuestro de la niña Karime Alejandra Cruz Reyes de 5 años y su tía Mónica Reyes.
Al día siguiente, martes 26 de agosto, a las once de la mañana, el taxista José Armando Salinas Linares, conductor del taxi 574 fue interceptado en la colonia Puerto México de Coatzacoalcos y detenido; según se conoció por filtraciones de datos, estaba señalado por el primer detenido, como participante de la desaparición de la niña y su tía.
Confirmado. La madrugada del miércoles 27 de agosto, unidades antisecuestro de la PGJ, una unidad del Servicio Médico Forense, policías ministeriales y de otras corporaciones, arribaron sigilosamente en medio de la discreta oscuridad, al domicilio de Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez o Miguel Alberto José Hernández (a) “el Charro”, se afirma que, guiados por uno de los dos detenidos; hicieron excavaciones en la vivienda , removiendo un piso de cemento, para exhumar los cuerpos de la niña Karime Alejandra y su tía Mónica Reyes, que ahí yacían sepultados de forma clandestina.
En las primeras horas del día, los cuerpos en bolsas de plástico, fueron trasladados a la ciudad de Cosoleacaque, al Servicio Médico Forense para practicarles pruebas de laboratorio y esconderlos en una cámara refrigerada, con capacidad para cuatro cuerpos y ocultarlos de la indiscreción de los medios de comunicación. (“los pinches medios)
FIN DE SEMANA EN VERACRUZ
En tanto, se hacían los preparativos para recibir en Boca del Río, a Emilio Gamboa Patrón; al secretario de Hacienda, Luis Videgaray; al Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, además del Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, y a funcionarios federales de muy alto nivel. La idea fue que el escabroso hecho, no trascendiera, mientras se tuviera esa importante visita.
El jueves 28 y el viernes 29 de agosto, el gobernador Javier Duarte de Ochoa fue el anfitrión del grupo de funcionarios federales, que vinieron al estado de Veracruz, a pasar un agradable fin de semana.
Mientras que el procurador del estado, Luis Ángel Bravo Contreras, fustigaba a quienes lo cuestionaban, sobre los rumores de la aparición de los cadáveres de las dos secuestradas; el gobernador Javier Duarte de Ochoa, aseguraba públicamente a los medios de información, que “la niña Karime está viva”. Sus colaboradores le seguían mintiendo
En Coatzacoalcos, el miércoles 27 de agosto, tres horas después del hallazgo de los cadáveres, y durante una reunión de seguridad (?) encabezada por el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita, trascendió que existían indicios de que los cuerpos de Karime y su tía Mónica Reyes habían sido hallados, versión que una vez más fue negada por el funcionario.
DESESPERADOS
Desesperados, esa misma noche del miércoles 27, los padres de Karime iniciaron la búsqueda de la verdad y el gobernador aseguraba que no había tal hecho y que las investigaciones continuaban. Y lanzaron el eslogan, “En Veracruz no hay lugar para la delincuencia” además del discurso, “la PGJ reitera su compromiso de revelar la información con absoluta transparencia y en total apego a la legalidad”.
Ni información oportuna, ni transparencia, solo en el benéfico caso de la duda; la mala asesoría, la ingenuidad, la perversidad, si usted quiere. ¿Qué le gusta?
A la par, en redes sociales empezaron a circular versiones que por sus datos congruentes, daban certeza de la realidad que se pretendía ocultar y así los diarios de Coatzacoalcos y la región trataron de publicar la versión, pero fueron censurados, solo el diario La Red propiedad del Magistrado del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Veracruz, Edel Álvarez Peña, se arriesgó y publicó la versión de “José García” – la filtración de la PGJE – quien daba datos del hallazgo y otros puntos que aquí analizaremos.
LA VERSION DE “JOSÉ”
La versión menciona que: “el secuestro de la niña de 5 años, Karime Alejandra, habría sido planeado por Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez, ´El Charro´, Jorge Salinas, ´El Panadero, y la tía de la niña, Mónica Teodora Reyes Baruch”.
´El charro´ y Mónica eran novios y ella fue la de la idea, ante las deudas que tenían en casa de empeño. Ella propuso el ´tiro´ a su novio y se buscó de socio al panadero. Se da el secuestro y la menor reconoció al novio de la tía, fue cuando tomaron la decisión de asesinarla.
La tía se opuso, además, no consiguieron el dinero del rescate, por eso la tía se echó para atrás, lo cual ´El Charro´ lo vio como traición y por eso también le dieron muerte. Las dos estarían enterradas en la casa de ´El Charro´´, en la colonia Luis Echeverría, calle Alfredo Bonfil, detrás de la escuela conocida como la ETI.
Después de la marcha, la policía, no se sabe de qué dependencia, detuvo a ´El Charro´ fue interrogado por el grupo antisecuestros a cargo del comandante Vaquero, lo calentaron y murió, o se les pasó la mano o lo chingaron a propósito, no se sabe. El cadáver de este fulano apareció encostalado el lunes pasado ( 1° de septiembre ), en Minatitlán, y lo tienen en la SEMEFO, a punto de ser enviado a la fosa común, si no lo reclama nadie.
Antes de que muriera en manos de la policía, ´El Charro´ contó el móvil e involucró a la tía. La policía busca a él otro cómplice, ´El panadero´, (Felipe Sosa Ascanio) pero no se sabe nada”.
¿Y DONDE ESTÁ EL CHARRO?
Esa fue la versión filtrada. Los datos publicados en las redes sociales, aportan también la fotografía de una persona de tez morena que tiene visibles hematomas en el rostro, detrás de él, se observa una lona en la pared, con logotipos de la PGJE y de la PJ (Policía Ministerial) y del que se afirma, es en vida y al momento de ser detenido, Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez “el Charro”. –El logotipo de PJ (policía ministerial) es reciente, data de hace cuatro meses, antes era AVI (agencia veracruzana de investigaciones) habría que justificar la detención de “el Charro” en ese lapso.
La versión pareciera ser de alguien que estuvo en el lugar de los hechos. Días después la propia procuraduría se encargó de confirmar esa misma versión, pero se entramparon y negaron tener detenido a Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez (a) “el Charro”, a quien calificaron de “prófugo”.
En las redes sociales, un usuario de Facebook, señaló que “la fotografía del supuesto asesino de la niña no corresponde a Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez, sino a (*) Miguel Alberto José Hernández y era un pájaro de cuentas, un malandro de la Transístmica”.
“LA INVESTIGACION” DE LA PGJE
Este viernes 5 de septiembre (nueve días después de que hallaron los cuerpos) el procurador Luis Ángel Bravo Contreras, en conferencia de prensa, presumió la captura de José Armando Salinas Linares, como participante del plagio y homicidios de la niña y su tía, e informó que estaban prófugos; Felipe Sosa Ascanio y Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez o (*) Miguel Alberto José Hernández con lo que se confirmó que la foto publicada en calidad de detenido, si era la de “el Charro”. Y aún más a lado de la foto que difunde la PGJE de José Armando Salinas Linares, agregan la foto “siluetiada” (recortada) de Miguel Alberto Lemarroy, en donde ya no aparecen los logotipos de PGJE Y PJ, pero es la misma que fue filtrada sobre su detención.
A esto cabe cuestionar, ¿qué persona detenida llevó a la policía, al lugar en donde estaban sepultadas la niña y su tía esa mañana del 27 de agosto para que las exhumaran?
¿Quién señaló como partícipes a Felipe Sosa Ascanio (prófugo) y a José Armando Salinas Linares, quien apenas este viernes 5 de septiembre, (diez días después de su detención ) fue presentado como detenido señalado por la PGJE?
¿En donde está Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez o Miguel Alberto José Hernández (a) “el Charro”, es verdad lo que publicó “José García”, que murió en el interrogatorio?
¿Es verdad que el encostalado que fue tirado en estado putrefacto en Minatitlán el 1° de septiembre, es Miguel Alberto Lemarroy “el Charro”?
LA FILTRACIÓN DE DATOS SALIÓ DE LA PROPIA PGJE
Se conoció este fin de semana en la PGJ, que existe una investigación para dar con quienes filtraron a través de las redes sociales la historia, dando a conocer toda la operación, en donde el procurador Luis Ángel Bravo Contreras y el propio gobernador, Javier Duarte de Ochoa, fueron exhibidos.
Todo hace indicar que se trata de agentes policiacos resentidos, de acuerdo a lo que manifiestan a través de redes sociales, cuando dicen; “Que poca madre si es que están los cuerpos y ese tal Vaquero que en realidad se llama Jesús Macario Vaquero, el cual nos torturó y nos puso cuando trabajábamos con él en SSP, si es el que anda matando gente, que se le investigue”.
Y más; afirman que Jesús Macario Vaquero quien dirige un grupo antisecuestros de la PGJE, es el mismo que torturó a cuatro electricistas acusados del homicidio del pastor, Claudio Martínez Morales, por cuyas causas salieron en libertad, no por ser inocentes.
“HACEN SU DESMADRE Y SE VAN”
Policías Ministeriales; “Lo malo es que ellos vienen de Xalapa a embroncarnos y se regresan, los que firmamos, somos quienes tenemos que aguantar la bronca”.
En un caso parecido, cuatro agentes de la policía ministerial de Coatzacoalcos, afrontan actualmente cargos por tortura, cuando ellos no participaron, pero tuvieron que firmar como “policías aprehensores”.
Finalmente Bravo Contreras reconoció que en días pasados existió una filtración de información dentro de la PGJE, misma que fue subida a internet en una página de Facebook, hecho que será investigado al interior de la dependencia.
“Tengo una investigación abierta pero esas filtraciones que contienen signos de verdad en cuanto a lo que era una versión de lo que ya estaba fluyendo en la averiguación”, refirió el funcionario estatal a la prensa.
En el refuego, y con el riesgo de ser denunciada, firmó la investigación ministerial, y la consignación de los presuntos plagiarios y homicidas, la agente tercero del ministerio público, Karla Marina León Perdomo. La consignación plagada de irregularidades auspiciada por la PGJE a cargo de Luis Ángel Bravo, lleva ya, el 99 por ciento de posibilidades, de que el único detenido, José Armando Salinas Linares, salga en libertad en unos días, por haber sido detenido fuera de flagrancia, sin haber de por medio una orden de aprehensión; por haber sido retenido más de diez días y “forzado a declararse culpable”, además de no existir ninguna prueba aportada por la PGJE de los cargos que se le imputan. Esa es la PGJE, en el Veracruz en donde veces de inocentes se fabrican culpables, y ahora de los delincuentes, se fabrica inocentes.
ENTRAMPADOS
Otra vez la detención anticipada. José Armando Salinas Linares sostiene que fue detenido el lunes 26 de agosto e ingresado al Cereso hasta el 5 de septiembre a las seis de la tarde, después de ser torturado. Una vez desaparecido por la PGJ, el taxista delincuente, José Armando Salinas, sus familiares interpusieron una denuncia misma que quedó inscrita bajo el numeral 622/2014 de la agencia segunda del Ministerio Público del sector Palma Sola de Coatzacoalcos, a cargo del licenciado César Jaimes Ascencio.
RUMBO A LA LIBERTAD
Cuando trascendió por la filtración de la PGJE, la detención del taxista y los cargos, los familiares del desaparecido interpusieron el juicio de amparo 842/2014 Mesa IV, para que los responsables justificaran legalmente su detención por medio de una orden de aprehensión, sin embargo en el informe de los Juzgados, se negó el hecho. Es decir que cuando fue detenido (26 de agosto) no había orden de aprehensión, la consignación del MP, pidiendo al juez la orden de detención, se presentó el viernes 29 de agosto en el Juzgado Tercero. La orden se giró el miércoles 3 septiembre y el viernes 5 de septiembre el presunto homicida, “fue detenido” e ingresado al Cereso. El sábado a las 11:00 de la mañana se le tomó su declaración preparatoria, representado por la defensora de oficio, debido a que su abogado aun no sabía que ya estaba en el Cereso.
Por enésima vez en Veracruz, si hay lugar para la impunidad, José Armando Salinas Linares, saldrá en libertad, no porque sea inocente, sino porque un grupo de aprendices en la PGJ, le dieron todas las facilidades.
SE DERRUMBAN
Otra vez el caso, “la investigación” se cae a pedazos, como la propia procuración de justicia. ¡Alguien debe hacer algo!
Otra vez la simulación. Otra vez la necesidad de criminalizar a una de las víctimas; a Mónica Reyes Baruch, la tía de la niña Karime, una inocente que pagó con su vida, vivir en uno de los estados más inseguros.
Mónica tenía adeudos, uno de ellos – según sus familiares- con José Armando Salinas, “el Gordo”, a quien debía 25 mil pesos, que pidió para comprar un automóvil, por el que firmó un pagaré, mismo que está en litigio, por la falta de pago en un juzgado civil.
Su relación –se dice- de amistad con Miguel Alberto Lemarroy Gutiérrez (a) “el Charro” la llevó a que este en su taxi, la transportara junto con su sobrina Karime a la escuela, ante un desperfecto en el automóvil de Mónica.
La confianza, el comentario sobre la posición económica de los padres de Karime, despertaron la ambición de los taxistas para cobrar un rescate. Los criminales al estar muerta Mónica, se justifican como es normal, declarando que Mónica planeo el secuestro. La procuraduría sin aportar pruebas criminalizó a la víctima, que en todo momento protegió a su sobrina y la sigue cuidando en el más allá.
Termina otra historia más de mentiras, de imprecisiones, de simulaciones de procuración de la impunidad, no de la justicia.
Un pequeño grupo incrustado en la Secretaria de Seguridad Pública y en la Procuraduría de justicia, engañaron al gobernador Javier Duarte de Ochoa y lo exhibieron vergonzosamente ante la opinión pública.
Y es más, lo expusieron al escarnio público.
Es obligado. Y debe ser de inmediato. Deben rodar cabezas…
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