Martín Cruz
Nanchital, Ver.-
Luego del conato de violencia que se registró en días pasados entre taxistas y choferes de autobuses foráneos por la disputa de los pasajeros, la delegación del transporte público vigilará de cerca el comportamiento de estos servidores públicos, quienes además ponen en riesgo la integridad de los usuarios.
Ángel Carsolio Hernández, delegado de transporte público, enfatizó que esta dependencia fungió como mediador en el conflicto que se ventiló ante la Agencia del Ministerio Público Investigador de Nanchital.
No es la primera vez que se suscitan los enfrentamientos entre taxistas que ofrecen el servicio colectivo y los choferes de autobuses de segunda, de tal forma que continuarán los operativos con el fin de evitar que los trabajadores del volante adopten una modalidad que no les corresponde, dijo.
Reiteró, que el servicio colectivo es una práctica que los taxistas no tienen permitido, aunque pese a las amonestaciones, continúan infringiendo las normas que dicta transporte público, dependencia que será insistente con los ruleteros que insistan en ofrecer dicha modalidad.
Así mismo, dijo que los autobuses foráneos de la ruta Transportes del Istmo han procurado renovar algunas de sus unidades, lo cual no es fácil debido al alto costo que representa adquirir un vehículo de pasajeros en buenas condiciones.