A pesar del daño, el número de víctimas no es muy elevada debido a que el epicentro tuvo lugar en una zona poco poblada.
Un terremoto de magnitud 6.11 sacudió este miércoles la provincia de Jorasán Rasavi, al noreste de Irán, con epicentro en el pueblo de Sefid Sang a las 10:40 hora local, teniendo como resultado cuatro pueblos destruidos en un 40 y 100 por ciento.
A pesar del daño, el número de víctimas no es muy elevada debido a que el epicentro del terremoto tuvo lugar en una zona poco poblada, teniendo el registro hasta el momento de dos muertos en Jorasán, señaló Shahin Fathi, el jefe adjunto de las operaciones la Media Luna Roja de Mashad.
Por su parte, el jefe de los Servicios de Emergencia, Pir Hosein Kolivand, explicó que “el mayor daño” lo sufrieron los pueblos de la zona y advirtió de que existe la posibilidad de nuevas réplicas y de un aumento del número de heridos.
El corte de las comunicaciones telefónicas y de varias carreteras de la provincia impide tener todavía una cifra definitiva de heridos, que se sitúan entre seis y once, dependiendo de las fuentes.
También el suministro de agua ha sufrido cortes y las escuelas han sido cerradas en muchas zonas de Jorasán, incluida la ciudad de Mashad, donde una de las réplicas tuvo una magnitud de 4.7 grados en la escala Richter.
El Centro Sismológico Nacional de Irán informó de que el movimiento telúrico se registró a 10 kilómetros de profundidad, a 60.23 grados de latitud y 35.83 de longitud.
Mientras el Servicio Geológico de Estados Unidos dijo que el sismo tuvo una magnitud de 6.1.
Irán es propensa a los movimientos telúricos por las fallas existentes en la nación de Oriente Medio. En 2003, alrededor de 26 mil personas fallecieron por un terremoto de magnitud 6.6 que arrasó la histórica ciudad de Bam, en el sureste del país.
