Uno más se encuentra prófugo pero ya se tiene plenamente identificado
Felipe García Hernández
Agua Dulce.,Ver.
Dos de tres sujetos considerados los presuntos asesinos del profesor Jorge Luis Canul Yamas, fueron detenidos mediante un rápido operativo coordinado por la Secretaria de Seguridad Pública (SSP) y de la Agencia Veracruzana de Investigaciones (AVI), en el municipio de Agua Dulce.
El educador quien trabajaba en la escuela primaria “Cuauhtémoc”, tuvo su domicilio particular ubicado en la avenida del Maestro sin número, de la colonia kilómetro 2, su cuerpo fue hallado el pasado 14 de Octubre durante un incendio que se registraba en la vivienda y el cual fue reportado a Protección Civil Municipal.
Fue el personal de ese departamento quienes al acudir a sofocar el fuego, se percataron que en el interior se hallaba un cuerpo sin vida y calcinado, estaba maniatado de manos y pies, pero también presentaba huellas de tortura, siendo identificado minutos después como Jorge Luis Canul Yamas de 50 años de edad.
A escasos días de su asesinato, uno de los partícipes fue detenido en medio de una persecución y balacera sobre una de las principales avenidas del municipio hidrómilo, luego de que lograra despojar de su arma a un elemento de la AVI y se lanzara de la patrulla oficial en movimiento.
Identificado como Darío Arévalo Vázquez de 22 años de edad y con domicilio particular ubicado en la calle Independencia de la colonia Kilómetro 2, fue trasladado a la cárcel preventiva y puesto a disposición del Ministerio Público.
Así también, horas después fue detenido en base a la confesión del primer participe del crimen, Francisco Jiménez Antonio o Jaime Castro Carreto, mejor conocido como “El Guacho” de 32 años de edad, quien presuntamente es un desertor del Ejército Mexicano.
Con domicilio en la calle Xalapa de la colonia Solidaridad, este segundo cómplice también se encuentra tras las rejas de la cárcel preventiva y a disposición del fiscal, mismo que en las próximas horas determinara la situación legal de ambos, aunque se espera sean consignados al Centro de Readaptación Social (Cereso), de la ciudad de Coatzacoalcos
