Por El Bicho Politicón
Llegó feliz, se dio tiempo para tomarse selfies y abrazar a los ‘amigos’, lucía en su elemento, rodeado de los “suyos”, como todo un rockstar fue recibido por la multitud frenética, sin duda alguna, los más entusiastas de ese 20% que aprueban su gestión, ahí estaba pues, el presidente Peña en la asamblea nacional priista, con los brazos en alto, como medallista de oro de unos juegos olímpicos, como pez en el agua.
Momentos antes de la llegada del presidente, los discursos de Ochoa Reza, presidente del PRI, Ruiz Massieu, secretaria; un Beltrones disparándose al pie cuando dijo “nadie que se defina como priista puede estar por encima de la ley”, y ahí estaban los muy orgullosos priistas acusados de corrupción (Fidel, Murat, Marín…), ellos, los que están por encima de la ley no se sintieron aludidos, con su mejor talante de cínicos empedernidos, solo sonreían.
Osorio y Meade sostenían una plática, creo que sobre ‘tapados’ y candados y sobre el nuevo-nuevo PRI, mientras, los gritos de ese viejo PRI que no termina de morir se dejaban oír: ce-te-eme, ce-ene-o-pe, ce-ene-ce, pe-tro-le-ros… Ochoa Reza habló de ‘intensas deliberaciones’ donde lo único claro fue que le abrieron la cancha a un Meade que quiere jugar y que el presidente no lo ve mal.
Intensas negociaciones donde Ruiz Massieu hablaba de ‘construir, reconstruir y renovarse’, el cambio de piel de la serpiente no hace que su veneno sea inocuo, y menos que no vaya a picar, eso es el PRI, la misma gata pero revolcada, los mismos corruptos de siempre: ayer fueron los Salinas, los De la Madrid, los Del Mazo… hoy son los Peña, los Duarte, los Osorio, los Meade.
Los mismos que tienen a este país jodido, sin crecimiento, hundido en la corrupción, la violencia y la impunidad, los mismos que dicen que ya son otros y que ahora sí no nos van a fallar, los mismos que dicen (Peña) que quienes ‘han traicionado la confianza de la gente pagarán por sus actos’, pero ahí estaba un Gerardo Ruiz Esparza (SCT) en primera fila tomándole fotos a su jefe, muy sonriente, sabiendo que lo dicho por Peña solo es para vender un producto (el PRI) y que los corruptos gozan de cabal impunidad.
Pues eso.