Luego de darle un empujón el conductor del taxi número 8 al automóvil 333 también del servicio de alquiler de Nanchital, que no dejo daños en ninguna de las dos unidades, el chofer de la segunda unidad mencionada realizo un gran escándalo argumentando que se lo había hecho a propósito, acudiendo al parecer la dueña del vehículo quien agrando más el problema, por lo que intervinieron elementos del mando único, quienes tras dialogar con ellos, lograron que se retiraran de la calle 18 de marzo, frente a la escuela Benito Juárez García. Texto y foto Artemio Hurtado Ruiz.