Por: José Luis Velázquez Hernández
Luego de intensa lucha por conseguir beneficios y tocando puertas en la capital del estado al alcalde de Las Choapas, Marco Estrada Montiel, le han ido cerrando las puertas el gobierno priista. Ese mismo gobierno que un día lo acobijo y le dio poder político y económico para el beneficio de él y de los suyos, es decir, su gran familia
Se le vio en días pasados por los pasillos del palacio del gobierno, y en una que otra dependencia gubernamental estatal para lograr obtener obras y apoyos para el pueblo de Las Choapas, solo que su inmadurez política, como siempre, lo ha llevado a declararse, o a exhibirse como un político de corazón amarillo, en vez del rojo, como muchos pensaban, y abrirle las puertas sobre todo en la zona rural a choapense al aspirante de la diputación federal perredista
Esto sus amigos, los de hueso colorado, lo ven como una traición del hombre que pidió permiso en la pasada elecciones a las alcaldías, a que solo por esta ocasión, nada más por esta, se pondría la camisa amarrilla con el objetivo de ser realidad su sueño, ser presidente municipal de Las Choapas, solo que su pasión y su inexperiencia política lo llevaron a traicionar la mano que le dio de comer y el amarrillo le infectó y contaminó el color rojo
Las consecuencias de los compromisos priistas estatales con el alcalde, hoy el pueblo las pagas, por la simple y sencilla razón que los recursos y obras así como apoyos que se esperaban y que aterrizarían este año para Las Choapas, se fue al tambo de la basura o sencillamente al archivo las solicitudes de obras y no hay para cuando resolverlas
Para remediar el grave error político, de que nada más llevan la playera amarilla por conveniencia y no por amor al partido, comisionaron a la primera dama Gloria Ochoa Ruedas, para que se filtre al PRI y se una a la campaña política de José Luis Sáenz Soto y así ganarse la confianza del jefe Duarte para asegurar, según ellos, la candidatura a la diputación local tricolor que está a la vuelta de la esquina
Y contra viento y marea, de lo que digan y opinen los amarillos y los rojos, la presidenta del DIF municipal dejó a un lado su orgullo y con la frente en alto ya se ha parado en uno que otro evento político del tricolor con el objetivo, de asegurar la diputación y rescatar a su esposo del hueco en que cayó y esta atorado por no definir una postura política leal y sincera
EL problema es que a Marco Estrada Montiel, no se le ve futuro político por la zona de Las Choapas, cumpliendo con sus administración se va a su rancho a contar las ganancia obtenidas en su gobierno o invertirlas en las carreras de caballos que son la pasión de su vida, que el bienestar del pueblo
Por lo pronto, se le seguirá viendo por los pasillos del palacio del gobierno del estado con solicitudes en mano en busca de soluciones a los problemas de Las Choapas…Respuesta, la de siempre… Si…pero no saben para cuando
Lo bueno a todo esto, es que las Choapas no está sola, hay un diputado y un síndico que cuidan, vigilan y protegen de sus intereses y me refiero a Renato Tronco Gomez y Javier Basáñez Silban que pese a las críticas favorables o negativas de la sociedad, no quitan ni quitaran la vista de los recursos del pueblo
Aunque muchos dicen que la postura de Javier Basáñez en el palacio es como una piedra en el zapato de Marco Estrada Montiel, hay quienes opinan diferente y dicen lo contrario…¿Qué bueno que no le pierdan la vista mucho a la chequera porque hasta el que cuenta los billetes en tesorería, no canta muy mal las rancheras
En Moloacán, las cosas no andan muy bien que digamos porque ahí si hay presidente municipal, pero no un gobierno…la prueba está en que la ciudadanía sufre las consecuencias de invertir tiempo dinero y esfuerzo para alguna solicitud o gestión en el palacio municipal, y nunca encuentra al alcalde Omar Ricárdez Chong
Es decir, la casa está sola y vacía y no hay quien la atienda.
Lo que no sabe la población es que existen dependencias del gobierno o instancias federales, a donde pueden emitir sus quejas o denuncias ciudadanas por la falta de un buen servicio a la población por parte de sus servidores públicos y a la que pueden recurrir sin ningún costo y ese departamento se llama CONTRALORIA DEL ESTADO
Para que pongan en orden las cosas en el ayuntamiento y zapatero a tu zapato, petrolero a tu trabajo y maestro a tu escuela…¿ o que acaso no hay profesionistas en Moloacán, que puedan ejercer un cargo público?
¿Necesariamente tiene que hacerlo un petrolero o un maestro? La decisión al cambio está en manos de la misma ciudadanía, solo es cuestión de tener el valor civil y emitir su demanda ciudadana que es un derecho que les ejerce la Constitución Política de Estados Unidos Mexicanos, háganla valer o remediar el error hasta las próximas elecciones.
