Las Choapoliticas…Por Juan Manuel Jiménez García.

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VERACRUZ VIOLENTADO.

Nadie para la violencia en nuestro estado, Veracruz está sumido en una espiral de asesinatos, secuestros, extorsión, robos y delitos menores al por mayor, no hay poder humano que nos libre de esta ola que nos tiene con el Jesús en la boca cada vez que salimos a la calle o cada vez que personas desconocidas llegan a comprar a nuestros establecimientos.

Y por más que tratamos de guardar la calma, la psicosis está ganando terreno a la cordura y los ciudadanos están realizando tareas que solo les compite a las autoridades, pero no hay otra alternativa que defender el patrimonio en muchos casos hasta con la vida, como le sucede a lo largo y ancho de todo nuestro bello estado.

Como siempre las autoridades se curan en salud diciendo que en todo el país sucede lo mismo, pero la violencia en Veracruz ya no es normal, miles de familias está siendo afectada por este fenómeno sin que alguien se haga responsable de frenarla, es más existe la sensación que hasta la promueven para tener prisionero al ciudadano dentro de esta violencia.

Porque para nadie es un secreto que la guerra entre grupos de la delincuencia que se disputan el control veracruzano existe uno que tiene protección del estado, por ese motivo el ciudadano común, queda entre los fuegos de estos grupos, ocasionando un daño colateral enorme que hasta el momento ha dejado miles de muertes inocentes.

A estas alturas es difícil de creer que todos los muertos se dedicaban a actividades ilícitas, sobre todo después de lo que sucedió en Alto Lucero donde la versión oficial no concuerda con los testigos del poblado que desmienten a las autoridades y pone en tela de juicio la parcialidad de la justicia en combatir a estos grupos que han sembrado el terror en Veracruz.

Pero eso no es todo, los expertos en política vaticinan días donde la violencia se va a recrudecer de tal manera que se estaría cerrando este 2016 como uno de los más violentos en la historia del estado, desde luego que esto estaría repercutiendo en varios ámbitos pero sobre todo en la economía estatal.

Quizás en el fondo de este descontrol en materia de seguridad por parte del estado, duele la actitud del gobernador saliente Javier Duarte de Ochoa, que se ha cansado de declarar que aquí no pasa nada y que los veracruzanos vivimos en un paraíso que solo existe en su retorcida mente.

Falta de respeto para aquellas familias que siguen buscando los restos de sus esposos, hijos, padres en los cientos de fosas clandestinas que existen en Veracruz, y donde las autoridades, incluyendo al gobernador se han hecho pato en reconocer que efectivamente los desaparecidos veracruzanos se pueden encontrar en esos lugares.

El Padre Solalinde en una ocasión por su paso por este estado, declaró de manera categórica que Veracruz era una gigantesco cementerio, no solo de indocumentados sino también de cientos de desaparecidos a manos de la delincuencia organizado pero también apunto que el estado tenía mucho qué ver en este asunto.

Recuerdo que los lamebotas del gobernador se le fueron con todo a Solalinde por estas declaraciones, es más hay una versión que se dice que personas cercanas al gobernador le habían pedido que abandonara el estado porque su vida corría peligro, en una clara amenaza por destapar el modus operandi de las bandas que azotan la tranquilidad del estado.

La violencia se salió de control, en todos los aspectos, esto todavía no termina y en los próximos meses estaremos presenciando (literalmente) la lucha descarnizada y sin cuartel por el control de las actividades de estos grupos por ganar la plaza, Veracruz desde hace tiempo se convirtió en territorio importante para el narcotráfico la cual ha ocasionado una guerra cuyas repercusiones solo están afectando a los ciudadanos.

TAXISTAS EN LA MIRA DE LA DELINCUENCIA.

Hace apenas unos cuantos años, este gremio era uno de los más importantes en el municipio, se les respetaba y tener una concesión de taxis era equivalente a una ficha o plaza en Petróleos Mexicanos, a nuestros amigos taxistas se les consideraban gente pudiente por las ganancias que dejaba este trabajo.

Es más, no era necesario ser el dueño de la concesión para darse ciertos lujos, los choferes este empleo les dejaba buenas ganancias, algunos lo supieron aprovechar y crearon un patrimonio para la familia, otros como pasa en varios aspectos de la vida, derrocharon los beneficios de ser chafirete por pensaron que no habría una crisis como la que existe actualmente.

Esta crisis los puso en situación de ser un grupo vulnerable, es decir algunos fueron seducidos por el canto de las sirenas y cayeron en las garras de la delincuencia, quizás la mayoría lo hizo por llevar un poco de dinero a la casa, porque el ser chofer de taxi ya no alcanza, entre la cuenta y la gasolina quedaba poca ganancia.

Desde luego que esto no justifica nada, pero si es un atenuante por la cual varios taxistas optaron por el camino fácil, los resultados ahí están; los últimos asesinatos ocurridos en el municipio son conductores de estos vehículos, no se vale generalizar pero la cifra indica que va a la alza este problema con estos trabajadores del volante.

Es presa fácil para la delincuencia este sector, están a carne de cañón y como sucede en otras partes del estado y del país, se está convirtiendo en una fábrica de reclutamiento de la mafia que controlan la distribución de drogas en pequeñas ciudades como la nuestra, y de preferencia si los reclutas son jóvenes.

SE FUE UN GRANDE…JUAN GABRIEL.

Juan Gabriel fue un artista polifacético, cantaba con un estilo único todos los géneros, rebaso la barrera de las clases sociales, es decir las canciones de Juanga las entonaban tanto de la clase social alta como el proletariado, ejemplo de superación ya que desde temprana edad quedo sin su padre y su madre (a la que le dedico un sinfín de canciones) tuvo que llevarlo a in internado porque no podía sostenerlo.

Fue ahí en ese lugar que conoció a un señor llamado Juan que le inculcó el gusto por la música, pero el talento ya lo traía de nacimiento, orgulloso de sus raíces que a pesar que en muchas ocasiones tuvo la oportunidad de tener las dos nacionales, la gringa y la mexicana nunca quiso traicionar a su país.

Cantautor internacional, polémico y que también tuvo que pagar el precio de la corrupción en México, cuando fue acusado de evasión de impuestos. Como todos los divos vivió una vida tormentosa, lleno de amores, desamores, encuentros y desencuentros, uno de los primeros artistitas que nunca negó su sexualidad.

Varias generaciones crecimos con su música, lloramos con ella y en muchas ocasiones dedicamos una de sus melodías a la novia, esposa, amante o amigos.

Su música fue catalogada como arrabalera, los psicólogos decían que promovía el abuso del alcohol y que influía en la conducta de las personas, atacado por su preferencia sexual por los grupos religiosos que alguna ocasión pidieron fuera expulsado del país.

Altruista de corazón, gran parte de sus ganancias fue destinado a cientos de albergues e internados para niños abandonados, donaba de manera constantes a fundaciones de caridad tanto en México como en Estados Unidos.

Su gran amor fue su madre, su ciudad favorita Juárez…DESCANSE EN PAZ ALBERTO AGUILERA VALADEZ.

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