Fuentes oficiales narraron que algunos de los cuerpos de los reos fueron apilados y a otros les prendieron fuego.
12/02/2016 – 05:07:00 hrs. / Ciudad de México
Luis Castro
Agencia Reforma
A los reos asesinados en una riña en el Penal del Topo Chico les fracturaron las piernas para que aparentemente no pudieran huir y después les destrozaron la cabeza a tablazos.
Fuentes oficiales que tuvieron acceso a la escena del múltiple crimen narraron que algunos de los cuerpos fueron apilados y a otros les prendieron fuego.
“La mayoría de los muertos tenían la cabeza destrozada y partida, otros hasta aplastada… las piernas las tenías fracturadas”, describió uno de los informantes.
“Algunos cuerpos estaban apilados, en uno de los montones que vi había cinco amontonados, se les veían tablazos, aparentemente los golpearon con tablas o tubos. También vi dos (cuerpos) quemados”.
En la riña fueron asesinados 49 reclusos y 12 resultaron con heridas diversas, de los cuales cinco fueron hospitalizados.
La disputa fue entre dos grupos de los Zetas, cuyos líderes Jorge Iván Hernández Cantú, alias “Comandante Credo” y Juan Pedro Saldívar, el “Z-27”, se disputaban el control del centro penitenciario.
La riña se desató en los ambulatorios C2 y C3, y también llegó a un patio en la parte trasera del Penal.
De los lesionados, las fuentes detallaron que los más graves fueron heridos con objetos punzocortantes hechizos y también golpeados en múltiples ocasiones.
“Muchos de los golpeados que sobrevivieron también tenían tablazos y heridas aparentemente de puntillas y golpes con tubos”, narró el informante.
Las fuentes confirmaron que para controlar la riña, las autoridades mantuvieron a dos grupos de presos esposados y a otros incluso les pusieron grilletes.
