Hasta que les llegó el nuevo conserje del cual esperan no sea una treta de las autoridades escolares y al rato se lo lleven a otra escuela
Escrito por: Jairo Torres Luria
Los padres de familia de la escuela primaria América, cumplieron su palabra el pasado miércoles, de no permitir el acceso al alumnado hasta que llegara el nuevo conserje que el Director General de Educación Primaria, Alejandro Acevedo Palestino, les había prometido, y es que como todos saben esta acción fue tomada ya que el supervisor de la zona escolar número 119, José Cruz Catalino Tecuapetla Huerta, quien simplemente pensó que los padres de familia no tomarían en cuenta su acción.
Los padres familia encabezados por la presidenta de la sociedad, Esmeralda Alvarado Domínguez, se reunieron desde temprano impidiendo que el portón de la institución fuera abierto con esto negando el paso a todo maestro y niño, esta acción era para manifestar su inconformidad en contra de las autoridades escolares los cuales pretendían dejarlos en problemas al quietarles a un intendente.
Fue cerca de las 8 de la mañana cuando a la institución llegó el joven que dijo llamarse Adrián Castro Cocom, quien dijo que había sido enviado por las autoridades escolares para prestar su servicio en la primaria antes mencionada, pero esto solo sería momentáneo en lo que se tomaba en cuenta el escalafón, tras escuchar esta noticia los padres, nuevamente se enfurecieron, haciendo notar que no serían engañados por las autoridades de la escuela ni por los altos mandos que mueven las piezas a nivel Xalapa, y es que esta persona llegó sin su nombramiento cosa que puso a dudar a los padres.
Por lo que se dieron a la tarea de todos juntos pedir una explicación al director, Delfino San Juan Cuevas, al respecto y este les dijo que se comunicó vía telefónica con el supervisor antes mencionado y que el joven tenía que ir a buscar su nombramiento a la supervisión de la ciudad de las Choapas. Debido a esto los padres explicaron al director que si esto se trataba de una burla o intentaban tomarles el pelo, nuevamente verían de lo que son capaces, a lo que el director les explicó que el joven trabajaría el tiempo necesario y si lo movían a la escuela llegaría otro y no había de que preocuparse.
Para no dejar cabos sueltos los padres le hicieron saber al director que esta persona tenía que estar de regreso a la institución antes de las 12:30 del día, o de lo contrario harían de las suyas defendiendo lo que ellos dijeron les corresponde por derecho. Cabe hacer mención que en su totalidad el alumnado estuvo a las afueras de la escuela hasta que la situación llegara a su fin de una forma benefactora para los padres o bien si sería necesario el paro de las labores.
