Guadalajara.
Un bebé de tan solo un año y ocho meses de edad falleció al recibir una bala perdida en la cabeza durante un sepelio en el Panteón Jardín, en el municipio de Guadalajara.
La tarde del pasado domingo se llevaba a cabo un funeral en dicho cementerio cuando la familia del bebé escuchó unos disparos al aire libre. Una vez que terminó el funeral y salieron del lugar, se dieron cuenta que el bebé estaba herido.
Rápidamente el pequeño fue trasladado a la clínica 34 del IMSS, pero al ingresar al área de urgencias, los médicos nada pudieron hacer.
“Aproximadamente 20 minutos después, sobre la clínica 34, baja en el reporte del arribo de un infante, un menor de 1 año 8 meses, con un impacto en cráneo el cual quedó occiso justamente en este lugar”, detalló un policía.
Hasta el momento se desconoce la identidad de los responsables del suceso.
