Con la intención de hacer conciencia sobre el cuidado de la naturaleza, Doña Irma Pérez se casó con el árbol que sembró hace 40 años en la Congregación Hidalgo en Pueblo Viejo, Veracruz.
Comentó que desde los 20 años tuvo este sueño al ser amante de la naturaleza y para concientizar del amor a la vida en el planeta, ha conseguido casarse con este árbol.
Reconoció que al principio se burlaban de ella por la intención de contraer matrimonio con un árbol, sin embargo, siempre tuvo el apoyo de su familia y hoy festejan el enlace con más de 100 invitados, con los cuales compartió pastel, hubo vals, víbora de la mar y festejó en grande con zacahuil.
