Frente a su mamá hombres armados se adentraron a la vivienda, donde lo sacaron a la fuerza y lo subieron a un auto
Centro, Tabasco
El pequeño de 11 años, se encontraría jugando con sus amigos sobre la prolongación del malecón Leandro Rovirosa Wade, en la colonia La Manga II, muy cerca de la pescadería ‘Alex’, cuando un vehículo de color oscuro se aproximaba lentamente, las risas y diversión del menor, que jugaba a la pelota, se convertirían en un suplicio para sus padres.
Eran las ocho de la noche, el niño regresaba a su casa, ayer tendría que ir a la escuela y fue mandado a dormir, habría dado algunos pasos hacia adentro de su domicilio cuando cuatro hombres ingresaron detras de él, lo tomaron del brazo, y se lo llevaron enfrente de su madre, quien entró en shock ante lo sucedido. “No hablen a la Policía o les va a ir peor”, fue la amenaza de los delincuentes.
Habrían pasado tres horas desde el secuestro; la incertidumbre, el terror de no saber de su hijo, la impotencia al no poder hacer nada e ir en su búsqueda había embargado a la familia Ventura, que se dedica a la distribución de pescado, quienes dejaron pasar a las patrullas que acudieron a la colonia La Manga, cuando los vecinos reportaron el incidente.
Los padres, tíos y abuelos se habían reunido en la sala de aquella casa, que sería marcada de por vida ante el plagio del menor, cuando el teléfono de la casa avisaba de la llamada que tanto esperaban por saber de su hijo, pero que los aterraba al saber que la vida del niño estaba en peligro; con palabras altisonantes el secuestrador indicó: “Queremos cinco millones de pesos o no vuelven a ver al chamaco, si lo quieren de vuelta ya saben lo que tienen que hacer”.
