Un estudio de ADN revela que el heredero al trono de Inglaterra e hijo de Lady Di tiene una antepasada asiática y su sangre no es ‘azul’
Redacción / Fotos: Especial
16/06/2013 14:00
CIUDAD DE MÉXICO, 13 de junio.- Unas pruebas de ADN al príncipe Guillermo de Inglaterra revelaron que por su cuerpo no circula sangre “azul” sino india.
Los resultados del análisis de su saliva relacionan al duque de Cambridge con una pariente lejana de su madre, la fallecida princesa Diana de Gales.
La pariente en cuestión sería Eliza Kewark, una mujer mestiza que vivió en la región occidental de la India y que se casó con Scotsman Theodore Forbes.
Hasta ahora se pensaba que la familia de Lady Di había tenido antepasados de origen armenio, pero el análisis de ADN precisó que Kewark era, al menos, medio india, según lo difundió el diario español ABC.
Las investigaciones se llevaron a cabo en la universidad de Edimburgo, donde los científicos establecieron el vínculo tras descubrir que los descendientes de Kewark portaban un ADN mitocondrial, que sólo puede ser transmitido por la madre. Exclusivamente los originarios del subcontinente indio son portadores de esta rara cadena de ADN.
El responsable de la investigación, Jim Wolson, consideró que el vínculo genético entre el príncipe Guillermo y su hermano menor Enrique y Eliza Kewark resulta “inexpugnable”.
Su primogénito no se escapará de su pado indio
Ante el inminente nacimiento del primogénito del príncipe Guillermo y su esposa la duquesa de Cambridge en julio próximo , muchos ya especulan con la posibilidad de que las raíces indias también alcancen al bebé, aunque los científicos aseguran que sería prácticamente imposible ya que sólo la madre puede transferir ese gen.
El príncipe Guillermo, por tanto, se convertirá en el primer rey de la familia británica con raíces indias, algo que ha dejado perplejos a los medios británicos, protagonizando portadas de diarios como The Times.
Los duques de Cambridge aún no han realizado ningún viaje oficial a la India, como hicieron el Príncipe Carlos y su mujer Diana de Gales en 1992, aunque quizá esta revelación pueda ser la excusa perfecta para conocer los secretos del subcontinente.
