El Capilano es considerado la atracción turística más antigua de Vancouver, ahí se atraen las personas.
Cruzar el puente colgante de Capilano, considerado la atracción turística más antigua de Vancouver, puede transformarse en una inesperada experiencia de amor.
Los guías bromean con que no resulta extraño sentirse, de pronto, inexplicablemente atraído por una persona al recorrer el puente. Esto se debe a la teoría de atribución errónea, que los psicólogos Donald Dutton y Arthur Aron comprobaron en un estudio realizado justo en este puente, hacia 1974.
El experimento fue así: una mujer hizo preguntas sobre el paisaje a varios hombres, justo en medio del Capilano, y después les dio su teléfono.
Hizo lo mismo en otro lugar. De los hombres que conoció en el puente recibió un número apabullantemente menor de llamadas invitándola a salir que de los que conoció en el otro sitio.
¿Por qué sucedió eso?
Porque se tiende a relacionar situaciones con personas y la adrenalina que genera el puente aumenta el sex-appeal de cualquiera.
Curiosamente, el origen de este puente también está relacionado con el amor. En 1889, George Grant construyó esta estructura, ubicada a sólo 15 minutos en auto del Downtown de Vancouver, para que su hijo pudiera pescar y explorar con facilidad la otra parte del terreno.
TOMA EN CUENTA
• Al puente colgante de Capilano se puede llegar mediante un shuttle gratis que sale cada 30 minutos del Canada Center, a partir de las 9:00.
• El acceso tiene un costo en dólares canadienses de:
$39 adultos
$32 estudiante
$12 niños